Drogas, mafia, fama y televisión. Un campo de batalla terrible en una guerra inesperada: la del presentador Alonso Caparrós (colaborador de ‘Sálvame’) y el actor y modelo Jon Kortajarena.
Todo comenzó el 25 de octubre de 2022 cuando Kortajarena acudió al programa ‘La resistencia’ para promocionar la serie de Movistar+ , ‘El inmortal’, ficción que relata la historia Los Miami, banda criminal que actuó en los 90.
Kortajarena interpreta, en la ficción, a un presentador de televisión cocainómano que ayuda a los mafiosos traficando con los famosos de la época.
«Interpreto a un presentador de televisión de los 90, bastante conocido, que se mete mucha farlopa, que tiene mucho vicio y hace de puente entre Los Miami y la jet set.
Interpreto a un presentador muy farlopero. Cuando me empecé a meter a ver cómo eran los programas de la época y cómo funcionaba eso, me di cuenta de que iba muy puesto. El real, en el que yo me inspiré
Le dijo Kortajarena a Broncano en ‘La Resistencia’. El humorista le pidió a su invitado que le dijera el nombre del presentador en el que se basó para preparar su papel.
El actor escribió las iniciales del presentador en cuestión y el nombre del programa.
Fue entonces cuando el actor proseguía con su explicación, metiendo la pata al dar el nombre en alto. El programa se veía en la obligación de censurarlo con la intención de protegerlo frente a posibles medidas legales por parte del presentador, emitiendo un largo pitido en su lugar.
El cabreo de Alonso Caparrós
El 27 de noviembre de 2022, en ‘Sálvame’, una experta en caligrafía dedujo que Kortajarena había escrito, en ‘La Resistencia’, las iniciales A.C. y que el nombre del programa era una sola palabra que empezaba por F. Blanco y en botella.
En los 90, Alonso Caparrós, reconocido drogadicto en rehabilitación, presentó un programa llamado ‘Furor’.
Caparrós, ahora colaborador de ‘Sálvame’, tras ver el vídeo, se puso serio:
Este tío es imbécil. Pero no es imbécil por lo que dice de mí. Todo el mundo sabe que yo tuve ese problema pero era un enfermo. Tenía una enfermedad. No podemos reírnos de los enfermos.
En su discurso, Caparrós dijo que no es cruel hablar a sí de un problema como la drogadicción, no sólo por los enfermos, también por sus familias.