Comienza hablándole de «don» y termina tratándolo como la peor versión del ser humano.
Así son las encerronas de Risto Mejide y su programa ‘Todo Es Mentira’ a sus invitados.
El programa de este 16 de junio de 2020 de Cuatro, abordó el tema de los audios de la agresión de un agente de los Mossos d’Esquadra a un joven negro, al que llamó «mono» y «negro de mierda», un hecho lamentable.
Sin embargo, en un asunto en el que hay un claro consenso en España, –un país que respeta las diferencias raciales salvo algún imbécil, que nunca faltan– llega Risto para intentar erigirse como juez y aprovechar el ‘Black Lives Matter’ norteamericano para hacer audiencia.
El invitado, Albert Palacio, portavoz del sindicato de Mossos ‘USPAC’, intentó explicarle lo que significa el trabajo de los policías en las calles y siempre aclaró que no está de acuerdo con los dichos por el acusado de un caso que está en los tribunales, pero para Risto no era suficiente, quería dictar sentencia mediática.
«Es una causa que está judicializada, tendríamos que dejar que siguiese su cauce. Nuestra valoración es que estamos en contra de cualquier discriminación a toda persona por raza o género”, explicaba el representante de los Mossos con total tranquilidad.
«Por lo que se escucha en el audio sí (le parecía una actitud racista), ahora catalogar a esta persona de racista es tirar muy lejos», afirmaba Palacio, quien destacaba que podría tratarse de una equivocación en medio de un contexto de elevado nivel de estrés.
«Me imagino que los policías están para los momentos en los que la adrenalina está a tope y justamente tiene que ser gente formada para que no ocurran estas cosas, y lo que me sorprende como ciudadano es que usted desde el sindicato de policías esté defendiendo a su compañero», gritó Risto indignado, perdiendo los papeles por el hecho de que Albert no le daba la razón.
La tranquilidad del representante de los Mossos hizo estallar una vez más a Risto, que se mostró como un tirano de poltrona, espantando a sus invitados, así como a los propios tertulianos que no le bailan el agua.
El presentador estalló a decir improperios sin dejar hablar a su entrevistado y le despidió de golpe echándolo del programa. El propio Palacio se quedó bien a gusto: “Cálmese un poco, tiene mucha falta de educación”.