Ahmadineyad y sus felicitaciones.

El régimen de los mulás felicita la Navidad mientras simultáneamente condena a muerte a los iraníes que abandonan el Islam y se convierten al cristianismo.

Las palabras de felicitación se las lleva el viento, pero las penas de muerte para los apóstatas del Islam, y de los que se convierten al cristianismo se aplican.

IRNA ha informado que Ahmadineyad ha felicitado la Navidad a los cristianos.

Pero, pero, IRNA no quiere recordar que el 3 de septiembre de 2008 el parlamento iraní aprobó un nuevo código penal por 196 votos a favor y 7 en contra, en el que se establece la pena de muerte para apóstatas, o sea a los que dejan el Islam. Las comunidades cristianas y Baha’i de Irán son las que serán afectadas mayormente por esta decisión.

Muchas de las victimas de la ley de la “apostasía” son los musulmanes que se convierten al cristianismo, pero las victimas también incluyen pensadores liberales y miembros de la minoría religiosa Iraní Baha’i.

“Este proyecto del Código Penal es una flagrante violación de los derechos humanos u fundamentales por parte de un régimen que reiteradamente ha abusado de las minorías religiosas y de otra índole” “Esto es simplemente otro intento legislativo por parte del régimen iraní para perseguir a las minorías religiosas del país y de todo el mundo”, dijo el presidente y fundador del Instituto sobre la Religión y Política Publica, Joseph K. Grieboski.

Personas cristianizadas han sido condenadas por “apostasía” desde 1994, luego que un converso capto la atención internacional. Pero en los años que siguieron, los cristianizados y los evangelizadores han sido brutalmente asesinados. Creyentes locales sospechan que el gobierno haya desempeñado un papel en los asesinatos.

“Ellos –los clérigos del régimen de los mulás- comenzaron a asesinar a los pastores y obreros cristianos”, informó un pastor evangélico iraní.

“Legalmente no son llevados a los tribunales, sino que simplemente los matan diciendo que se ahorcaron ellos mismos o diciendo otras excusas”.

En 1994, el Obispo Haik Hovsepian de Irán, fue encontrado brutalmente asesinado y enterrado en secreto con 26 heridas de arma blanca después de defender a un cristiano convertido. En hombre convertido al cristianismo, Medí Dibaj, ya había cumplido 10 años en la prisión, pero aun así se le estableció la pena de muerte por el delito de haber abandonado el Islam.

Hovsepian obtuvo el apoyo de las Naciones Unidas, el Congreso de los EEUU, y otros órganos mundiales para presionar a Irán, esto para que liberara a un cristianizado. Después de ayudar liberar al convertido, Hovsepian pronto desapareció y más tarde fue encontrado muerto. El hombre convertido también fue asesinado en secreto después de su liberación.

“Un examen cuidadoso del proyecto demuestra claramente que no es nada mas que un instrumento legislativo para consolidar el poder de todo el régimen y extender su tiranía religiosa a nivel mundial”, comentó Grieboski.

Algunas partes del proyecto indican que tanto hombres como mujeres puede ser ejecutado por apostasía. Otras secciones parecen limitar la pena de muerte a los varones. Las mujeres “Apostatas” en vez de esto enfrentarán cadena perpetua o “dificultades”.

Además de la apostasía, otros delitos que resulten en la pena capital son: repetida embriaguez, violación, homicidio, robo a mano armada, tráfico de drogas, adulterio y la homosexualidad masculina en Irán.

Irán es uno de los peores países perseguidores de cristianos en el mundo.

El territorio judío de Gaza, ocupado por árabes, mayormente musulmanes está promoviendo leyes similares a las iraníes.

En Gaza los islamistas de Hamás, en el poder, están persiguiendo a los cristianos, con la connivencia del silencio cómplice de la mayor parte de la Media.

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