Italia es un país magnífico para visitar, incluso con la vista dirigida al cielo. Una guía itinerante a lo largo de la península nos lleva a algunos de los observatorios astronómicos que se pueden visitar para disfrutar de un panorama seguramente sugerente.
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Valle d’Aosta
Iniciamos con el Observatorio astronómico del Valle de Aosta, situado en el valle de Saint Barthélemy, en la provincia de Aosta. Terminado en el 2003 es el único en su género debido a la variedad de la instrumentación disponible, la estructura dispone además de una estación meteorológica, un laboratorio heliofísico, un recorrido didáctico y un planetario.
Véneto y Lombardía
En la región de Véneto se encuentra el Observatorio astronómico de Padua, una de las principales estructuras del INAF Instituto Nacional de Astrofísica, conocida también con el nombre de «Specola», cuyo origen se remonta al 1767.
El edificio se encuentra en la parte antigua del castillo medieval de Padua (siglo XIII). La estructura de observación por excelencia es la situada en Asiago, fundada en 1942 y vinculada al observatorio de Padua.
En Lombardía se encuentran distintos centros de observación. Comenzando por el Observatorio astronómico de Brera (OAB), de reconocimiento mundial y considerado como la más antigua institución científica de Milán.
Las sedes son dos: la de Milán, en Brera, fundada en 1762, con un precioso archivo histórico, dos grandes bibliotecas y tres cúpulas (la «Zagar», la del «cercatore di comete» y la de «Schiaparelli») abierto para visitas nocturnas y diurnas, la sede de Merate (Lecco), en Brianza cuenta con dos cúpulas históricas, una sala multimedia y una biblioteca con más de 6000 llibros, todo abierto al público.
Piamonte, Emilia Romaña, Abruzos
En Piamonte no hay que perderse las interesantes visitas diurnas y nocturnas al Observatorio astronómico de Turín, nacido en el 1759 en un edificio del centro de la capital y transferido, en el 1912, a la actual sede en la cima de la colina de Pino Turinés, a 9 km de Turín y a 6 km de Chieri.
En Emilia Romaña, además del Observatorio astronómico de Boloña y a su estación de Laiano, hay que señalar en san Giovanni Persiceto (BO), la presencia de toda un área dedicada a la astronomía, incluyendo un planetario, un museo (con la colección de meteoritos más importante de Italia) y el Observatorio, en el que es posible admirar distintos fenómenos astronómicos. Es espectacular la observación de las manchas solares gracias la helióstato.
Es muy evocadora la visita que se puede realizar, en los Abruzos, a la estación de Campo Imperatore en el Gran Sasso d’Italia, a una altura de 2200 metros, activa desde 1958 y equipada con dos telescopios para las observaciones de supernovas y para actividades de carácter divulgativo y didáctica.
La estación recibe cada año a miles de personas que en invierno llegan al observatorio gracias a un teleférico desde la zona de Villetta (Fonte Cerreto).
Lacio y Campania
Es famoso en la región de Lacio, el Observatorio astronómico de Roma.
Fundado en 1938, en la antigua Villa Mellini en el promontorio de Monte Mario, desde el edificio se goza de una maravillosa vista de la Ciudad Eterna.
Desde 1988 el observatorio cuenta, a su lado, con la sede de Monte Porzio Catone, en Frascati, donde cada año distintos proyectos y reseñas permiten al público acercarse a la astronomía.
La sede institucional de las ciencias del cielo del sur continental es el Observatorio de Capodimonte, en la provincia de Nápoles, que ha conservado intacto el atractivo del edificio del siglo XIX , la Specola.
Sicilia
En Sicilia, destaca la presencia de dos estructuras: el primero es el Observatorio astronómico de Palermo, situado en el Palacio de los Normandos, junto al magnífico casco histórico, que cada año organiza eventos astronómicos en sugestivos lugares del territorio siciliano.
El segundo es el Centro de estudios astronómicos de Roccapalumba, inaugurado en el 2008.
