El servicio de seguridad de la Casa Real, en cuanto tuvo conocimiento de lo sucedido, comenzó a averiguar cómo había llegado hasta allí
Están ya en boca de todos las andanzas de Francisco Nicolás G.I., el joven de veinte años que se hacía pasar por asesor del Gobierno para «colarse» en todos aquellos actos públicos que le permitieran engrosar su colección de fotografías con diversas autoridades políticas y empresariales y personajes de relevancia mediática.
Pero sus curiosos logros han despertado las alarmas. Preocupa que, con el único cebo de su labia y unos supuestos informes oficiales con sellos y firmas torpemente escaneados, consiguiera estar en la recepción que Felipe VI ofreció en el Palacio Real el día de su proclamación.
INVESTIGACIÓN
Es por ello que el servicio de seguridad de la Casa Real, en cuanto tuvo conocimiento de lo sucedido, comenzó a averiguar cómo había llegado hasta allí.
El «pequeño Nicolás» no era una de las personas directamente invitadas a la recepción, por lo que tuvo que acceder como acompañante de una de las personalidades que sí lo estaban.
Será difícil identificar a quien lo hiciera, porque el protocolo de seguridad vigente no exige que se ponga nombre y apellidos a esos «acompañantes» que figuran como autorizados en las invitaciones.
DESMENTIDO DE LA EMPRESARIA
Quien si parece haberse descartado ha sido la mujer que aparece junto a Francisco Nicolás en la fotografía que él mismo subió a las redes sociales del momento en que saludó al Rey.
Se trata de la empresaria experta en mayores Catalina Hoffmann, que según anunció en un comunicado publicado en su cuenta de Twitter, asistió «sola» a la recepción real y «jamás ayudó ni facilitó» al joven su acceso a la ceremonia.
Tampoco lo ayudó a «eludir los controles de seguridad», tal y como asegura en el comunicado.
@CatalinaHoffman, Ud sabe que lo que dice en el comunicado no es verdad, iba con Ud, y se lo presentó a varias personas incluso……
— LadyLeo (@vardulia) octubre 20, 2014