El 24 mayo 2015 se celebran en España 13 elecciones autonómicas municipales en las que Ciudadanos aspira y tiene como objetivo obtener representación en cinco comunidades autónomas (Madrid, Valencia, Murcia, Aragón y Asturias), así como 1.500 concejalas en las elecciones municipales del mismo día.
¿Es mucho? Para ponerlo en perspectiva, el PP tiene 26.000 concejales en la actualidad y PSOE 21.700 concejales. Pero Ciudadanos lleva menos de cinco meses a nivel nacional tras nacer en Cataluña en 2006.
Como explica Anabel Díez en El País, el partido que dirige Albert Rivera tiene en este momento nueve diputados en el Parlamento de Cataluña, nueve en el de Andalucía, dos eurodiputados y un centenar de concejales (la inmensa mayoría de estos últimos, procedentes de partidos locales que después de las elecciones de 2011 se disolvieron y pasaron a engrosar las filas de Ciudadanos).
En Madrid y Valencia el partido se ve con garantías de éxito, y en Murcia y Aragón estima que pueden dar “una sorpresa”, sobre todo a costa del PP. En Asturias aspira a ocupar el espacio que logró UPyD, que en 2011 entró en el Parlamento del Principado con un representante. Sus candidaturas estarán en las 13 autonomías que celebran elecciones, aunque han desistido de presentar listas en Ceuta y Melilla.
En cuanto a los Ayuntamientos, Ciudadanos tiene ya cerradas las candidaturas en 750 municipios, de los 8.200 que hay en España.
PRESUPUESTO
En la campaña de las elecciones andaluzas Ciudadanos gastó 250.000 euros; por la representación obtenida, nueve escaños, recibirá un millón de euros de asignación oficial. Ahora, para las municipales y autonómicas, han presupuestado un gasto de dos millones de euros, un dinero que pedirán prestado íntegramente a un banco: el único que accedió a darles créditos desde los orígenes del partido. El resto de entidades bancarias fueron muy renuentes, aunque ahora Ciudadanos ha pasado de no tener visibilidad para los bancos a ser acusado de tener como impulsoras a las empresas del Ibex. Esto último lo niega la dirección del partido rotundamente.