Y ENCIMA EL DUEÑO PUEDE ENFRENTARSE A UN DELITO DE COACCIONES

La Policía ayuda a una okupa a entrar en la casa ‘okupada’ y que había cerrado con un candado el propietario

Los agentes, a pesar de que sabían de boca de la propia mujer que estaba ocupando el piso, cortaron la cadena que le impedía acceder a él

Dantesco. La okupa se encuentra un candado en la puerta de la casa que ha ocupado ilegalmente, puesto por el dueño, y ni corta ni perezosa llama a la policía de Zaragoza para que le ayuden a entrar.

Los agentes, a pesar de que sabían de boca de la propia mujer que estaba ocupando el piso, cortaron la cadena que le impedía acceder a él. Y para colmo, la policía puede abrir diligencias contra el dueño por coacciones porque es diabética y no podía acceder la insulina que necesita administrarse.

Los bomberos también colaboran

La Policía echó mano de la ayuda de los bomberos para lograr acceder al edificio, situado en la calle Cerezo número 40, a través del balcón. Dentro del inmueble, los agentes comprobaron que no había nadie y que el dueño había puesto una cadena con un candado para que la okupa no pudiera acceder a su vivienda.

La Policía puede abrir diligencias contra él porque según la ley, los okupas son residentes de la casa y no se puede entrar sin una orden, por lo que se recomienda siempre usar la vía legal.

Según recoge Antena3, el propietario del inmueble asegura sentirse en una situación «de indefensión» completa. Según el testimonio de algunos vecinos, no entienden que los agentes hayan ayudado a la okupa y que encima sea el dueño el que se tenga que enfrentar a la Justicia.