Pinta fatal y lo tenemos al lado, porque de Italia a España se puede llegar en un día en coche y hacen falta menos de dos horas para hacerlo en avión. Y la gente se mueve y mucho.
El primer ministro de Italia, Giuseppe Conte, anunció a última hora del sábado 22 de febrero de 2020 la adopción de un decreto legal para la contención de epidemias que restringirá la entrada y la salida en las zonas afectadas por el coronavirus.
Todo después de que el director de la Agencia de Protección Civil de Italia, Angelo Borrelli, elevara a 76 el número de casos confirmados en el país.
En este nuevo balance se incluyen los dos fallecidos por la enfermedad, la última una mujer de Lombardía, que registra la mayor parte de los casos detectados hasta ahora, aunque las autoridades locales también han confirmado pacientes en Véneto.
De hecho, el primero de los fallecidos se ha registrado en esta última región, donde ha perdido la vida un hombre de 78 años, según la agencia Adnkronos.
La prohibición afecta a las 11 localidades consideradas epicentro de la epidemia, según ha explicado Conte.
Este decreto ley contiene «el poder evitar el movimiento de personas en las áreas consideradas de brotes, en la zona de la provincia de Lodi con 10 municipios involucrados y el de Vo ‘Euganeo, en Véneto».
Así las cosas, en estas dos áreas declaradas como escenario del brote, «no se permitirá la entrada y la salida, salvo excepciones específicas que se evalúen periódicamente», ha anunciado.
«Hemos adoptado un decreto legal con medidas para la contención y el manejo de la emergencia epidemiológica».
«El objetivo es proteger la salud de los italianos», ha añadido, al final de la reunión mantenida este sábado con los responsables de Protección Civil.
«El bienestar de los italianos ocupa el primer lugar de nuestros valores constitucionales. La salud ocupa el primer lugar en una jerarquía ideal de valores».
Más de 50.000 personas aisladas
Las 11 localidades son Casalpusterlengo, Codogno, Castiglione d’Adda, Fombio, Maleo, Somaglia, Bertonico, Terranova dei Passerini, Castelgerundo y Sanfiorano, en la región de Lombardía y donde viven cerca de 50.000 personas y se ha convertido en la zona cero de este foco de coronavirus en Italia.
Asimismo, también se han puesto en estado de aislamiento Vo’ Euganeo, en la provincia de Padua, de unos 4.000 habitantes, y donde se produjo la primera víctima mortal, un hombre de 78 años.
La segunda víctima es una mujer de 77 años que estuvo en Codogno, pero que falleció el pasado 20 de febrero en su casa por complicaciones respiratorias. No obstante, una prueba realizada tras su muerte ha confirmado que era positiva al virus.
Suspensión de actividades en Véneto y Lombardía
Por otra parte, el ministro de Deportes, Vicenzo Spadafora, ha anunciado la suspensión de todas las actividades deportivas previstas para este domingo en las regiones de Véneto y Lombardía, que comprenden los partidos de la Serie A de fútbol como Inter-Sampdoria, Atalanta-Sassuolo y Verona-Cagliari.
Conte ha explicado que, aunque algunos sectores políticos lo han pedido, no ve necesario por ser «desproporcionada» la suspensión del tratado de Schengen, sobre libre circulación de ciudadanos de la Unión Europea.
El jefe de la Protección Civil italiana ha actualizado el número de contagiados a 79 personas, entre ellas las dos víctimas, y que se reparten en 54 en Lombardía, 17 en el Véneto, 2 en Emilia Romaña y los dos turistas chinos en el Lazio y uno en Piamonte.
Un total de 33 personas están hospitalizadas con síntomas, de las cuales 18 están en cuidados intensivos, 11 en cambio están en aislamiento domiciliario.
La ministra de Educación, Lucia Azzolina, ha decidido suspender los viajes escolares tanto dentro de Italia como al extranjero. «Una precaución que en mi opinión es necesaria ante este escenario», ha mantenido la ministra.
COREA EN MAXIMA ALERTA
El Gobierno surcoreano ha decretado este sábado la alerta por enfermedades contagiosas a nivel «rojo», el máximo de su escala, ante el aumento de contagios del nuevo coronavirus, que ya ha afectado a 533 personas en el país asiático.
El Ejecutivo ha decidido activar el protocolo después de que el número de contagios se haya multiplicado por 17 en los últimos cinco días, especialmente en torno a la ciudad de Daegu, en el sureste del país.
«El problema del COVID-19 ha alcanzado un punto de inflexión», ha dicho el presidente surcoreano, Moon Jae-in, citado por la agencia Yonhap en la reunión celebrada con miembros de su Gabinete para activar el nuevo nivel de alerta y en la que ha añadido que «los próximos días serán muy importantes» para la evolución de la epidemia.
Cuatro muertes por coronavirus en Corea del Sur
A su vez, las autoridades surcoreanas han informado también del fallecimiento de una cuarta persona a causa del virus, un varón de 57 años que estaba ingresado en el hospital Daenam de Cheongdo, centro médico en el que estuvieron ingresadas otras dos víctimas mortales y que ha registrado 111 contagios.
Se cree que este centro médico pude convertirse en foco secundario de infección a través de las visitas que regularmente hacían miembros de la secta Shincheonji para hacer labores de voluntariado.
De las 123 nuevas infecciones anunciadas este domingo, 75 corresponden a seguidores de Shincheonji que estuvieron presentes en las misas multitudinarias celebradas por el grupo en su sede de la ciudad de Daegu (230 kilómetros al sudeste de Seúl), según informó hoy el Centro para la Prevención de Enfermedades Infecciosas de Corea (KCDC).
De estos, 70 son residentes en Daegu y la circundante provincia de Gyeongsang del Norte, las dos zonas que están concentrando la inmensa mayoría de casos en Corea del Sur hasta el momento.
El KCDC mantiene en cuarentena a más de 9.000 fieles de la secta ligados directa o indirectamente con las misas multitudinarias (congregaron a unas 1.000 personas) que se celebraron en Daegu y que se consideran clave para la propagación del patógeno.
A su vez se ha informado este domingo de otros 48 nuevos casos en distintos puntos de la geografía surcoreana, certificando que, más allá del foco en torno a Daegu, la epidemia ha entrado en una fase de contagio local.
De momento hay 6.039 personas que están en cuarentena y a las que se les están haciendo pruebas, según datos del KCDC.
El sábado, el primer ministro, Chung Sye-kyun, envió un mensaje tranquilizador y explicó que el virus puede ser contenido si el público coopera con las instrucciones de las autoridades.
Chung instó a evitar las grandes aglomeraciones, incluidas las manifestaciones después de que un grupo cristiano conservador desobedeciera las órdenes del Gobierno de Seúl y celebrara una gran concentración para protestar contra el Gobierno del liberal Moon Jae-in.