(Jesús Domínguez Sanabria, Revista Agustiniana). El verdadero título del libro debería ser Algunas preguntas de Dios al hombre, porque precisamente de eso se trata. Gregorio Vivaldelli sabe muy bien abrir la curiosidad y el interés de sus lectores a acoger tantos y tantos interrogantes como Dios nos hace a través de la realidad del mundo y de la vida, así como de nuestra propia inquietud en el existir de cada día. Y para ello quiere conducir a quien le lea a escudriñar la Palabra de Dios, a saciar la inquietud humana en las preguntas y respuestas que nos ofrece el texto revelado de la Biblia.
Para eso escoge 16 preguntas concretas que el mismo Dios o Jesucristo hace a determinados personajes del conjunto de los relatos bíblicos. Partiendo de ahí, el autor nos ofrece otras tantas más amplias; son capítulos o meditaciones interesantes, muy sugerentes, capaces de invitar a la meditación, a la evaluación de la propia existencia, a replantearse los objetivos vitales, y, sobre todo, a conseguir esas respuestas que se sugieren, o que claramente se dan, en los textos y contextos bíblicos donde están enclavadas las 16 preguntas seleccionadas que encabezan cada capítulo (la última analizada, precisamente es la que sirve de título al libro –Mujer, ¿por qué lloras?– sin que medie justificación o aclaración para que ella sea el título que encabeza la obra).
Para leer el artículo completo, pincha aquí:
Más en Religión
CONTRIBUYE CON PERIODISTA DIGITAL
QUEREMOS SEGUIR SIENDO UN MEDIO DE COMUNICACIÓN LIBRE
Buscamos personas comprometidas que nos apoyen
CONTRIBUYE
Home