Cristiano Ronaldo no engaña a nadie. El luso, resurgido de sus propias cenizas para volver a brillar, manda un mensaje alto y claro a Florentino Pérez, presidente del Real, a través de su agente/amigo, Jorge Mendes.
Pérez lleva semanas ‘rascando’ el mercado en busca de lo bueno, lo mejor con una advertencia clara: Ronaldo no quiere en el Real Madrid ningún nuevo delantero centro con galones.
El luso se siente cada vez más cómodo en una posición de ariete que se pide para el nuevo curso. Benzema/Morata saldrán y Cristiano apuesta por el fichaje de un atacante de banda que no le haga competencia en el puesto de goleador de área que heredará de un Karim desplazado hasta decir basta.
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