Cómo elegir el tocado para que sea tu mejor aliado y no el peor enemigo

Como sabéis, hay millones de tipos de tocados: desde los más chiquititos y discretos, hasta los que se asemejan a una pamela. Pero, ¿en función de qué debemos llevar uno u otro? No hay que olvidar que cada una es muy libre de plantarse un tocado tipo Gaga en la más discreta de las ceremonias, pero hoy vamos a hablar de protocolo, y de lo que en el terreno del tocado se «debe» llevar.

Si seguimos la lógica, las pamelas están hechas para tapar el sol, por lo que no tendría sentido aparecer con una, o con un tocado diseñado para cubrirnos de los rayos uva en una boda de noche. De este modo, según crece el día, nuestro tocado debería decrecer, y viceversa. Así, si tienes una boda de día, donde seguramente se harán fotos en la puerta de la iglesia, habrá un cóctel al aire libre, o simplemente vas a ir del brazo de tu pareja o de tu amiga a las doce de la mañana por la calle, es el momento de elegir un tocado generoso. Si se trata como decíamos, de un tocado con «ala» y consigues colocarlo perfectamente, el ojo que quede bajo el lado donde llevas el tocado, debería quedar en sombra, dando así un toque enigmático a tu mirada.

• ¿A qué lado se debe llevar?
  Aunque antes iba en función del brazo con el que las mujeres cogían a sus maridos para ir hasta la iglesia -y el tocado quedaba del lado contrario-, sobra decir que a día de hoy, debes llevarlo donde más te favorezca, y esto suele marcarlo el lado donde llevemos la raya; si la llevamos a la derecha, lo más natural será que nos veamos mejor colocándolo a la izquierda, de este modo se compensan los volúmenes y quedará más armónico.
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• ¿Se debe quitar el tocado en algún momento?
  El tocado no se quita durante la ceremonia. No es ninguna falta de respeto. Un tocado debe ser cómodo, y si lo es no te enterarás de que lo llevas. Si no, deberías haberlo pensado antes Durante la comida o la cena también debes dejarlo puesto. Hace poco leí que «una mujer que sale con la cabeza vestida de casa, debería llegar con la cabeza vestida a casa», pero en los últimos años, las mujeres, al llegar la hora del baile, se deshacen de fulares, bolsos e incluso zapatos de tacón para cambiarlos por unas alpargatas. Por eso, si realmente no te ves bailando con el tocado elegido, puedes prescindir de él en la pista de baile.

• ¿El tocado tiene que ir a juego con los zapatos y el bolso?
  Hace años que los zapatos y el bolso dejaron de combinarse entre sí, por la sencilla razón, desde mi punto de vista, de que no es antiestético combinar colores siempre y siempre que vayan en armonía unos con otros.

  También, desde que empecé, me doy cuenta de que muchas de las clientas que me piden tocados se esmeran mucho en que lleve todos los colores del conjunto elegido. Aunque nada tiene eso de malo, hay que saber que un tocado puede combinarse de manera que no lleve ningún color de los de tu vestido, cartera o zapatos, y aún así podrás ir discreta y armónica. Para mi es mucho más importante que armonice con tu tonalidad de piel o cabello.

• ¿Qué tocado debo elegir para mí?
  Nada está escrito en el mundo de los gustos, pero sí que podemos saber unos cuantos trucos que nos ayudarán a resaltar lo que más nos guste de nuestra figura y a disimular algún pequeño complejo.

  Una chica alta aportará sofisticación a su figura con un tocado pequeñito. Deberían evitar al menos las plumas alargadas para no crecer más de la cuenta.

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  Las bajitas, por el contrario, podemos aliarnos con las plumas de faisán, los tocados altos y hacia arriba, para que así, sumado al tacón -si es que hemos elegido también subir unos centímetros con los zapatos- podamos sentirnos altas y esbeltas por un día.

  Los tocados voluminosos pueden ser un buen aliado para una figura generosa en curvas. Las morenas aportarán luz a su cara optando por tonos claros en el tocado, mientras que las rubias destacarán los destellos de su melena con los colores más oscuros.

  Por otro lado, los tocados de colores claros lucen más en cabellos castaños y oscuros, mientras que los de tonos más oscuros resaltan más en cabelleras rubias.

  También debes tener en cuenta la cantidad de pelo que tienes. Tu peluquero puede hacer maravillas fijándotelo, pero si tienes poca cantidad y te pones uno muy voluminoso o pesado no irás cómoda. Te aconsejo, yo lo hago, que utilices diademas y peinecillo para dar mayor sujeción a los grandes tocados y que te sea más fácil llevarlo.

  Los tocados siempre quedarán más elegantes si los llevas con el pelo recogido o semirecogido, pero si tienes una melenita corta o un corte tipo bob opta por llevar el pelo suelto.