El Gobierno bielorruso prohíbe que la OSCE siga trabajando en el país

MINSK, 31 (Reuters/EP)

El Gobierno bielorruso ha anunciado este viernes que la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE), que ha criticado la forma en que se desarrollaron las elecciones presidenciales del pasado 19 de diciembre, no podrá seguir trabajando en el país.

El presidente, Alexander Lukashenko, acusado por los países occidentales de gobernar con mano de hierro y de reprimir a los medios de comunicación independientes, fue reelegido para un cuarto mandato en los comicios. Esa noche se produjeron en Minsk manifestaciones masivas en contra de los resultados electorales.

«La parte bielorrusa ha tomado la decisión de no continuar las operaciones de la oficina de la OSCE en Minsk», ha informado el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores, Andrei Savinyj.

Los observadores de la OSCE dijeron que en la votación hubo irregularidades y condenaron la forma en que la Policía reprimió a los cerca de 10.000 manifestantes que protestaron en la capital por la manipulación de las elecciones. El Gobierno bielorruso considera que «la evaluación de las actividades de la OSCE en Minsk demuestra que la OSCE ha cumplido su mandato», ha indicado Savinyj.

La oposición ha advertido de que esta decisión del Ejecutivo podría dañar las relaciones con la Unión Europea. «Esto provocará un empeoramiento de la relaciones con la UE y aumentará la influencia de Rusia en Bielorrusia», ha señalado Grigori Kostusev, un miembro del Frente Nacional Bielorruso que se presentó a los comicios.

«El motivo» de esta decisión «es que la OSCE no reconoció las elecciones», así que «es una decisión política», ha declarado Kostusev a la agencia Reuters.