Feroces luchas de poder en las altas esferas de Telecinco

(PD).-Los problemas de Telecinco no están en las audiencias, ya que ha vuelto a repetir liderazgo de audiencias en octubre con una cuota del 21,5%, seguida por TVE (La1) con 17,1% y Antena 3 de Televisión SA con 16,3%, según datos del portal especializado vertele.com. Más de cinco puntos de distancia sobre su rival privada. Los beneficios de la compañía también van viento en popa: ascendieron un 14,6%, hasta los 262 millones de euros, frente a la bajada de casi un 40% de los de Antena 3, hechos públicos un día antes.

Entonces, ¿dónde está el problema? Cuenta Carlos Ribagorda en el Confidencial.com que la empresa de Fuencarral vive unas encarnizadas luchas internas. Vasile suspira por un puesto en Mediaset, propietaria de Telecinco, en Roma. Allí vive de viernes a lunes, y allí sigue viviendo su familia. Su puesto quedaría, entonces, vacante.

Esto ha provocado que la segunda línea de directivos de la cadena se mueva para ir arañando cotas de poder. El resultado es que en Telecinco hay dos grupos peleando por añadir departamentos a su ámbito de decisión: uno, el llamado ‘clan de los gallegos’, liderado por Manuel Villanueva, director de Contenidos; el otro, el italiano, liderado por Alberto Carullo, jefe de Antena, apoyado por los italianos, entre ellos Mássimo Musolino, director de Gestión y Operaciones, y por el propio Vasile.

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El clan gallego -Pedro Revaldería, director de Programas, y Chema Bautista, director general de Atlas- consiguieron hacerse con el departamento de Informativos al cesar a Juan Pedro Valentín, que dependía directamente de Vasile, y sustituirle por Pedro Piqueras, que depende ahora de él.

Dicen que la tensión ahora se corta con un cuchillo. En la última reunión de dirección, sorprendentemente, Vasile le quitó la palabra a Villanueva, desairándole, y le pidió a Carullo que hiciera él el repaso semanal. “Fue bastante brusco y una situación embarazosa. Nunca había pasado algo así en una reunión de esa importancia, que le quite la palabra a Villanueva y se la de a Carullo, que en teoría está por debajo de Villanueva. Es una muestra de que Vasile no congenia con el gallego”, según explica alguien que conoce la situación.