Cada rincón de la sala está marcado por las curvas de sus voluptuosas mujeres. Milo Manara (Italia, 1945) las muestra rotundas, carnales y ausentes de pudor. A tamaño natural, en paneles de luz, en mesas, sillas y coquetos biombos de metacrilato, las creaciones del dibujante italiano posan con descaro para seguir convertidas en las reinas del erotismo …
Lea el artículo completo en www.publico.es
Más en Otros medios
CONTRIBUYE CON PERIODISTA DIGITAL
QUEREMOS SEGUIR SIENDO UN MEDIO DE COMUNICACIÓN LIBRE
Buscamos personas comprometidas que nos apoyen
CONTRIBUYE
Home