Cuando el Real Madrid de Lorenzo Sanz se trajo a Edwin Congo desde Colombia en 1999 alguien debió creer que acabaría siendo una estrella del fútbol. El club blanco, en los años previos a la galaxia, pagó unos cinco millones de dólares por él, se lo llevó a Suiza de pretemporada y lo regaló para no volverlo a ver … Debía ser el complemento ideal para la mejor versión de Raúl González pero Congo salió del Bernabéu por la puerta de servicio rumbo a Valladolid. Allí marcó un gol …
Lea el artículo completo en www.elmundo.es
Más en Otros medios
CONTRIBUYE CON PERIODISTA DIGITAL
QUEREMOS SEGUIR SIENDO UN MEDIO DE COMUNICACIÓN LIBRE
Buscamos personas comprometidas que nos apoyen
CONTRIBUYE
Home