Las saunas familiares de Sánchez cruzan fronteras: ‘The Times’ sacude al PSOE con el escándalo de los “burdeles gay”

El verano político español ha dado un giro inesperado, y esta vez no por una moción de censura ni por un giro en el “procés”, sino por las viejas saunas familiares de Begoña Gómez, esposa de Pedro Sánchez.

El asunto, que llevaba meses dando coletazos en los medios nacionales, ha saltado ahora a la prensa internacional de la mano del prestigioso diario británico The Times, que no ha dudado en tildar el caso como el de los “burdeles gay” que salpican al presidente del Gobierno español.

El periódico británico va más allá del mero relato de los hechos y sitúa a Sánchez bajo una presión creciente para dimitir, subrayando cómo la oposición liderada por el PP le acusa de haberse beneficiado indirectamente del negocio sexual que dirigía su familia política, especialmente su suegro, Salustiano Gómez (aunque en algunos medios también aparece como Sabiniano).

Saunas, prostíbulos y audios: ingredientes de un cóctel político explosivo

La historia arranca en los años 80, cuando Salustiano Gómez, padre de Begoña, se embarcó en la gestión de varias saunas y locales de ambiente gay en Madrid a través de la empresa San Bernardo 36 S.L., incluyendo la famosa sauna Adán. Con el tiempo, estos negocios se diversificaron hasta incluir clubes de alterne y prostíbulos situados en lugares tan emblemáticos como el Paseo de la Castellana.

Todo ello aderezado con rumores —y alguna que otra grabación— sobre supuestos usos turbios de estos locales por parte de las llamadas cloacas del Estado para chantajear a personalidades políticas y empresariales mediante vídeos comprometedores.

Las informaciones actuales añaden un componente familiar: según algunas grabaciones inéditas del excomisario Villarejo, Begoña Gómez habría realizado tareas contables para estos negocios antes de que su padre cediera las riendas empresariales a su hermano Enrique Francisco tras el matrimonio con Sánchez en 2006. Esta línea argumental ha sido recogida por medios internacionales como The Times, que no escatima detalles al describir cómo el escándalo amenaza con socavar la credibilidad institucional del Gobierno español.

El PSOE entre la incomodidad y la defensa cerrada

El PSOE se ha visto obligado a salir al paso ante la avalancha mediática. La formación socialista denuncia una campaña orquestada por la derecha para vincular prácticas homosexuales con prostitución y estigmatizar al colectivo LGTBI, mezclando sin matices conceptos tan distintos como “sauna” y “burdel”. No obstante, la realidad política es que el caso ha abierto una grieta visible tanto fuera como dentro del partido. Algunos sectores exigen explicaciones contundentes mientras otros optan por atrincherarse en torno a Sánchez.

En paralelo, los editoriales internacionales se ceban con la imagen del presidente. The Times no solo critica los escándalos del entorno familiar sino también lo que considera una falta crónica de transparencia y autocrítica. Se le reprocha su tendencia a ver conspiraciones donde otros ven investigaciones judiciales legítimas, así como su costumbre —ya casi marca registrada— de esquivar el escrutinio público durante semanas.

Consecuencias posibles: erosión institucional y daño reputacional

Que un asunto así trascienda fronteras —y que además lo haga desde uno de los diarios más influyentes del mundo anglosajón— tiene consecuencias inmediatas:

• Se amplifica el desgaste institucional del Gobierno ante sus socios europeos.
• Se refuerza el discurso opositor sobre la necesidad de regeneración democrática.
• Se deteriora aún más la ya frágil relación entre Moncloa y parte del electorado tradicional socialista.
• El caso añade presión a una coalición parlamentaria sostenida con alfileres.

Por si fuera poco, The Times advierte que este clima contribuye al crecimiento de fuerzas políticas como Vox o Sumar, mientras sectores críticos dentro del propio PSOE empiezan a sugerir tímidamente un relevo antes de 2027.

Curiosidades y datos para no perderse

• El apodo británico para Sánchez es ahora “Don Teflón”, en referencia a su capacidad para esquivar (hasta ahora) las consecuencias directas de los escándalos.
• Según testimonios policiales recogidos en grabaciones internas, las saunas eran presuntamente usadas para montar trampas sexuales a políticos e incluso jueces durante gobiernos anteriores; un material codiciado por todas las cloacas imaginables.
• El local más famoso del entramado familiar fue la sauna Adán, ubicada en pleno centro madrileño. Propiedad legalmente vinculada a la mutua Muface durante años.
• El episodio ha reabierto viejos debates sobre si es posible separar vida privada y responsabilidades públicas cuando ambas convergen en negocios tan delicados como los del sexo.
• No es la primera vez que The Times fustiga a Sánchez desde sus páginas: ya lo hizo anteriormente llamándole “el galgo de Paiporta” por su huida ante situaciones incómodas, aunque esta vez el asunto es mucho menos anecdótico y bastante más tórrido.

Con todos estos ingredientes, parece claro que este verano político será recordado —al menos fuera de España— como aquel en que unas saunas familiares pusieron patas arriba toda una presidencia.