La imbecilidad de Eduardo Garzón sobre el aumento del paro se lleva el merecido zasca de Daniel Lacalle

El cinismo de socialistas y comunistas carece de límites.

Mientras desde UGT se niegan a manifestarse contra el Gobierno de Pedro Sánchez tras el incremento del desempleo para no agravar el “drama” de los parados, Eduardo Garzón lanza un disparatado argumento para justificar los dramáticos datos publicados por la Encuesta de Población Activa (EPA).

El hermano del ministro comunista de Consumo intentó desacreditar a Daniel Lacalle tras su publicación en redes donde demostraba la grave situación del sector laboral en España:

“El paro sube en 61.000 personas. Es la primera vez que sube el paro en el tercer trimestre después de la crisis financiera de 2011. En 2011 el paro se redujo en 16.000 personas. La tasa de paro sube hasta el 12,7%”, indicó el reconocido economista.

A lo que respondió Eduardo Garzón con su imbecilidad que se volvió viral en las redes.

“¿Por qué no cuentas que el número de parados ha aumentado porque hay más gente buscando empleo y no porque haya más destrucción neta de empleo? No querrás ocultar algo a tu público, ¿no?”

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Lejos de entrar en el debate con el hermano del ministro, Lacalle puso énfasis en dos de las frases más polémicas de figuras próximas al gobierno PSOE-Podemos para echar balones fuera ante el incremento del paro. El zasca es épico. 

“’El paro ha aumentado porque hay más gente buscando empleo’. Eduardo Garzón. Como ya dijo Ábalos ‘el paro ha aumentado porque hay más confianza en encontrar un trabajo’. No lo olviden”.

Es importante recordar que las polémicas excusas de Garzón llegan tras conocer que la Encuesta de Población Activa (EPA) desvela que el desempleo subió en 60.800 personas (hasta el 12,67%). Un dato que aún es más grave si se conoce que se trata de los peores resultados laborales en una década (a excepción del año 2020, cuando el país todavía trataba de recuperarse del impacto inicial de la pandemia).

Con casi tres millones de parados en España, la izquierda parece estar más preocupada en la búsqueda de excusas y bombas de humo que en soluciones reales que acaben con el drama laboral de España.