[VÍDEO] Un nuevo cerrojazo alimenta la leyenda negra del Rey y el 23-F

Un nuevo cerrojazo alimenta la leyenda negra del Rey y el 23-F. Lo cuenta A.I.Martín en El Semanal Digital: el empeño de los sucesivos gobiernos de la democracia por mantener en secreto los papeles hace que la historia se reescriba desde fuera con los renglones torcidos de testigos indirectos.

España no es el Reino Unido. Si lo fuera, el 23-F no tendría secretos para la opinión pública desde hace tres años. Allí, donde se conoce incluso lo que gasta la Reina Isabel en licores, los llamados Archivos Nacionales se desclasifican de forma automática cada 30 años. Tiempo suficiente, creen los británicos, para que su publicación deje de ser un problema para la seguridad nacional. Así de simple.

El libro de Pilar Urbano sobre el papel del Rey en el golpe de Estado ha devuelto a la actualidad el espinoso debate sobre la conveniencia de que, de una vez por todas, salgan de los cajones todos los documentos y grabaciones en torno a aquella fecha clave en la historia de España. Y que aún tiene grandes agujeros negros.

Según recoge un nuevo ‘Informe Buitre’, Urbano ha pasado de defender al Rey por el ‘caso Urdangarín’ en un programa de máxima audiencia en febrero de 2012 para «preservar la institución» a implicar a don Juan Carlos en un golpe de Estado. Esta teoría hay que recordar que no es nueva, en la época ya se insinuaba desde las páginas de El Alcazar y El Heraldo Español la maniobra del Rey con Alfonso Armada.

Urbano lleva tiempo escribiendo libros polémicos. Nativel Preciado lo reconocía en PD: «Es una persona que no respeta el off the record. Ese es uno de los inconvenientes para que le den crédito».

Sea verdad o no lo que cuenta en esta ocasión, la oportunidad comercial nadie la niega. Y a raiz de un avance publicado en El Mundo, Izquierda Plural, según nos recuerda ESD, solicitó este martes 1 de abril de 2014 en el Congreso que se desclasifique todo el material, así como la apertura de una comisión de investigación que ponga en su sitio a todos los actores principales del 23-F. Empezando por Don Juan Carlos. «Nuestra historia no puede tener ninguna duda (…). El pueblo no debe tener ni dudas ni sospechas», señaló su portavoz, José Luis Centella. 

La respuesta del PP no se hizo esperar, por boca de su portavoz en la Cámara Baja, Alfonso Alonso: un «no» tajante e innegociable, un nuevo cerrojazo. Alonso zanjó el asunto por las bravas: «La investigación política está muy clara, y también la actuación del Rey. Es un episodio para estar orgullosos», afirmó. Y más de lo mismo Carlos Floriano: «Yo no tengo ninguna duda de que Su Majestad el Rey es el garante y fue el garante de nuestro Estado de Derecho», aseguró.

Populares y socialistas se han limitado a cerrar filas en torno a la figura del Monarca -el elefante blanco según Urbano- como única reacción a las graves acusaciones que se vierten contra él en La gran desmemoria. Pero quedándose en la corteza, sin entrar en el debate de fondo: con la democracia más que asentada y Don Juan Carlos en los años finales de su reinado, ¿no es hora de levantar las alfombras del tejerazo? 

Porque no deja de resultar curioso que países como Estados Unidos y Alemania hayan desclasificado documentación referente al 23-F y que, por contra, España no lo haya hecho aún ni entre en los planes del Gobierno de Mariano Rajoy hacerlo.