Ha muerto Rutgerus Oelsen Hauer, popularmente conocido como Rutger Hauer. El eterno replicante que emocionó en con sus frases lapidarias resultó ser tan humano en realidad como sus palabras de androide en la mítica Blade Runner, historia atemporal del cine la película e historia atemporal del cine también su personaje.

El conocidísimo intérprete holandés ha fallecido a los 75 años tras una enfermedad repentina el pasado 19 de julio en su casa de Holanda. El funeral se ha celebrado este miércoles pasado en un acto cerrado y sin presencia de medios de comunicación. El respeto deseado por la familia ha hecho que la triste noticia no fuese conocida hasta días después.

En lo referente a grandes reconocimientos, en1988 ganó el Globo de Oro a Mejor Actor en una serie, miniserie o película para televisión por su trabajo en la TV-movie La escapada de Sobibor. En 1995 volvió a ser nominado al galardón sin llegar a llevárselo a casa, por su interpretación en el largometraje para televisión Patria.

Pero la gran fama internacional le llegó claramente con su trabajo más celebre, el replicante de Blade Runner, de Ridley Scott. El actor logró convencer a Scott para que le dejara recitar un discurso que terminó siendo parte de la historia del cine: “Yo he visto cosas que vosotros no creeríais. Atacar naves en llamas más allá de Orión. He visto rayos-C brillar en la oscuridad cerca de la Puerta de Tannhäuser. Todos esos momentos se perderán en el tiempo, como lágrimas en la lluvia. Es hora de morir.”. Pelos como escarpias, nos ponemos de pie. Con esta secuencia tan descomunal y bella, Rutger Hauer esculpió su inmortalidad.

Participó en más de dos centenas de proyectos a lo largo de su nutrida carrera artística y tenía pendientes en alarde de actividad profesional el estreno de seis películas, ¡seis!, y también una serie. Ligeramente menos conocido pero igualmente idolatrado por fieles seguidores fue su papel en Lady Halcon. Volvemos a ponernos en pie, este tío ha sido muy grande (para brillar como diamante recién pulido a poco que se le pusiese a tiro un buen papel de entre tanto villano lamentable de películas de acción barata que interpretó, realmente hay que serlo y mucho). Trabajó con Christopher Nolan en Batman Begins, con Robert Rodriguez en Sin City, por poner varios ejemplos.

Entre sus proyectos para pequeña pantalla, a la que nunca hizo ascos, destacan series tan pioneras en el éxito de masas como Smallville, True Blood y The Last Kingdom. Tampoco son títulos cualesquiera.

Su paso firme por las pantallas de nuestra infancia y adolescencia no se perderá en el tiempo…, sí, han adivinado, como lágrimas en la lluvia.