Electoralismo barato y morboso del PSOE con los menores

Los socialistas en el Cabildo de Tenerife buscaban un golpe de efecto electoralista. El caso de los supuestos abusos de un educador en la Casa Cuna, sumado a una denuncia anónima sobre otro hecho aislado en un centro de menores del área metropolitana, ha llevado a PSOE a reclamar una comisión de investigación sobre estos sucesos. La paradoja viene cuando se reclama información sobre el hecho en concreto y se alega, entonces, que la denuncia podría no ser cierta, que «habría que actuar con cautela».

El ‘happening’ montado por los consejeros Oval, Viciana y Valbuena se volvió en su contra. El inicio de la rueda de prensa ya era premonitorio. Teresa Cruz Oval aseguró que «ojalá nunca hubiéramos tenido que convocar a los medios para este asunto».

Y sí, es verdad, porque el único dato novedoso es el de crear una comisión a coste cero para que se investiguen políticamente los hechos acaecidos en la Casa Cuna. El resto, pura especulación y conjetura, pero intentando responsabilizar al grupo de Gobierno en el Cabildo de los hechos denunciados.

La corporación insular, una vez se conocieron los hipotéticos hechos en esa instalación, emitió un comunicado donde, por pura lógica, se pedía responsabilidad, cautela y ofrecer todas las facilidades a la investigación en curso. Es más, por una mera cuestión de respeto se anunció que nadie del grupo de Gobierno (CC-PP) hablaría de la cuestión mientras no hubiese datos aportados por la propia investigación.

PRECIPITACIÓN

Lo cierto es que sólo han pasado algo más de tres semanas y ha tenido que ser la supuesta denuncia anónima de la madre de un menor la que ha empujado al PSOE a pedir explicaciones urgentes al Cabildo tinerfeño.

La responsable del área de Asuntos Sociales, Cruz Oval, precisó en la rueda de prensa que no había problemas en enseñar la denuncia. Sin embargo, cuando llegó el momento de enseñar la mano con la que tiró la piedra, la socialista abogó por esconderla y su compañero Nacho Viciana reclamó que «no generar alarmismos con una denuncia que tenemos que ver si es cierta». La alarma, lamentablemente, fue provocada por el propio PSOE.