Acuarela de Segis Fernández en El Norte

Por José María Arévalo

( Las dos páginas de El Norte de Castilla dedicadas a la acuarela de Segis Fernández el domingo 8 de marzo)

De nuevo protagoniza la sección “Pinceladas de Valladolid” que lleva los domingos Jesús Bombín en El Norte de Castilla, una acuarela de otro compañero de la Asociación de Acuarelistas de Castilla y León, Segis Fernández, un tema de la vallisoletana Plaza de España, que ocupa dos páginas completas del diario impreso. Primero fue protagonista otra de la hasta hace poco nuestra Presidenta, y que publiqué en este blog el 20.11.19, con el título “Acuarelas de Isa Menéndez”, a la que dedicó la doble página el día 3 de aquel mes; y después a otro compañero acuarelista, Chema Fraile, con una de sus acuarelas de la Acera de Recoletos a la que dedicamos el post de 01.03.20 “Acuarela de Chema Fraile en El Norte”. Ahora, el domingo 8 de marzo, ha dedicado El Norte de Castilla las dos páginas a la acuarela de Segis Fernández, estupendo acuarelista y compañero de salidas a pintar al campo y de las sesiones de la Asociación de Acuarelistas de Castilla y León, del que también hemos publicado bastantes artículos y fotos en estas páginas, tanto de su participación en las exposiciones navideñas de Art Aspace, a las que no falta nunca, como a las colectivas de nuestra Asociación y a exposiciones individuales suyas. Luego lo vemos, vamos ahora a las páginas de El Norte, que titula:

Aires caribeños en la meseta

“Segismundo Fernández –escribe Jesús Bombín junto a la foto de la acuarela que comenta- expulsó la prisa de este rincón que descubre la plaza de España más desenfadada, entregada al paseo y la tertulia,

Extraña el ritmo calmo que ofrece la acuarela en un entorno con sobredosis de prisa, ires y venires como el lateral de la plaza de España –próximo a la calle Duque de la Victoria- que las terrazas visten con el traje urbano de oasis de convivencia.

(Plaza de España. Acuarela de Segis Fernández)

Lo captó Segismundo Fernández (Oviedo,1947) una mañana de tantas en la que se fijó en el ambiente de una esquina que, como tantas de la ciudad, “nos suelen pasar desapercibidas de tanto pasar por ellas, olvidándonos de que nos pueden sorprender”.

Artista paciente, afronta la brega con el pincel con la misma flema con la que ganó el campeonato de pesca con mosca en Italia, atento siempre al detalle. “Me molesto mucho en la composición, colocar el horizonte es fundamental al pintar paisaje urbano”, desvela quien antes de entregarse a la paleta de colores trabajó como ingeniero metalúrgico en Michelín. Animado por el ansia de cambio vital montó una tienda de venta de productos de bellas artes, especialidad en la que acabó licenciándose en la Universidad de Salamanca. Mudado a un piso más pequeño, se prodiga ahora en la acuarela por requerir menos espacio que el óleo. “Procuro simplificar, decir lo máximo con lo mínimo”, comenta un artista que no suele vender su obra. “Pinto para divertirme, que ya sufrí bastante con el aprendizaje”

Manejo del horizonte

“Pintar un paisaje urbano de día y sin personas me parece absurdo, por eso incluyo movimiento. A la gente y los objetos hay que saber colocarlos, lo que requiere conocimiento de la perspectiva”.

OVENTENSE AFINCADO EN LA CIUDAD

-Observando a otros pintores. Su formación artística comenzó en la Escuela de Artes y Oficios de Oviedo en 1962, y en 1985 recaló en Valladolid, dando continuidad a su afición artística en su estudio y en cursos. Sigue atento a pintores de los que aprende, como Gary Tucker y Álvaro Castagnet.”

Nos da Jesús Bombín varias noticias de la biografía de Segis, algtunos de los cuales no conocíamos. Otros aparecen en nuestros post en este blog, tanto –ya decíamos- sobre su participación en las exposiciones navideñas de Art Aspace, a las que no falta nunca, como a las colectivas de nuestra Asociación y a exposiciones individuales suyas.

De estas últimas he encontrado nuestro artículo “Las acuarelas de Segis y Bernal abren el año” de 3.02.2011, del que creo vale la pena recoger el siguiente comentario: “De la serie de acuarelas de la playa de Las Catedrales, verdaderamente inspirada, que ya conocíamos de nuestro compañero de la Asociación de Acuarelistas de Castilla y León, Segis Fernández, una de las más atrayentes figura en su actual exposición de Caja Círculo de Claudio Moyano, con la que se ha abierto el año de las exposiciones […]

(Playa de Las Catedrales I. Acuarela de Segis Fernández en la exposición del Banco de Bilbao)

Comentaba con Segis, en su exposición, la dificultad de estas acuarelas, algunas, como la que les indico, pintadas sobre papel satinado, que tan escasamente absorbe el agua. Pero me decía que precisamente en ello radica su interés, porque trabajado en húmedo, con el mínimo de agua que admite, produce el efecto de endurecer la acumulación de pigmento sin restar transparencia. Es el resultado de muchos años experimentando con diversos tipos de papel. Yo lo recuerdo, hace ya quizá ocho o diez años, trabajando un pliego de satinado, a mi lado, frente al castillo de Simancas. Entonces obtenía resultados marcando el dibujo con un pilot o similar, solución muy usual pero que rebaja calidad al facilitar demasiado los contornos. No sabía que había ahora resuelto el problema sin tener que recurrir a los trazos de líneas, de forma que si no te lo dice no sabes que se trata de un trabajo sobre papel satinado. Un descubrimiento.

Gracias a Segis también, en aquellos años en que empezábamos ambos, con Paco Roldan y Buendi, Antoñito Pascual, Vicente Albaladejo, Raul González, etc., nuestra asociación castellano leonesa, descubrí al gran acuarelista Rafael García Bonillo, para mí el mejor de cuantos nos han precedido en esta tan difícil técnica y arte, al que hace ya tres años, a raíz de su fallecimiento, le he dedicado un blog,

En “Acuarelas de la AACyL en dos centros cívicos”, de 23.10.2019 sobre dos exposiciones colectivas de la asociación, escribí: “Segis Fernández aporta un buen retrato de busto de Juan Luis Mozo, en el que ha conseguido muy bien el parecido, aunque sin utilizar las técnicas en húmedo que dan calidad a los retratos pero con las que se corre el riesgo de perder el parecido. Así se trata de un muy buen retrato pero como acuarela menos creativo, pintado bastante en seco y con los rasgos de la cara muy acusados, un tanto en trazados oscuros que evitan tener que trabajar más las sombras, que son lo más interesante de los retratos.

(Retrato de Juan Luis Mozo. Acuarela de Segis)

Y también en mi artículo “Acuarelas y más en la nueva temporada de exposiciones”. De 8.10-2016, entre muchos otros, me refería él comentando otra acuarela suya: “…Segis Fernández, un tema de pinos muy sintetizado y limpio, pero a la vez con mucha fuerza. Pintar pinos tiene una dificultad, por la densidad de las copas, y Segis ha conseguido interpretarlas con transparencia gracias a la soltura de su pincelada, sin insistir”.

Solo me resta comentar que Segis trabaja con tanto éxito la acuarela como el óleo, técnica esta última con la que fueron seleccionados cuadros suyos de gran formato en los certámenes Acor, que todos los años reseñamos, los dotados de mayor premio, 6.000 euros, en nuestra comunidad; cualquier año de estos acabará llevándoselo él. Y que también obtiene multitud de premios en los concursos de pintura rápida al aire libre de nuestra Comunidad, por ejemplo varios primeros y segundos premios en el de San Pedro Regalado de Valladolid. Yo no he vuelto a presentarme a este desde que conseguí un primer premio –consideré entonces que ya había cumplido-, pero Segis continúa haciéndolo todos los años, un ejemplo de afición y constancia para todos nosotros. Que sigas así, Segis.