Los 10 datos que necesitas saber sobre los tatuajes

Si hace años los tatuajes eran cosa de marineros, rebeldes o tribus remotas, hoy la tinta sobre la piel se ha convertido en casi un accesorio más.

Desde ejecutivos hasta abuelos, pasando por influencers y deportistas, nadie parece resistirse a dejar su huella –literalmente– en el cuerpo.

Las cifras lo dicen todo: actualmente, cerca del 50% de las mujeres y el 40% de los hombres llevan al menos un tatuaje, y la tendencia sigue subiendo entre los jóvenes y no tan jóvenes.

Pero detrás de esta explosión artística hay mucho más que moda o estética. Los tatuajes arrastran historias milenarias, avances tecnológicos y hasta supersticiones dignas de novela negra.

Antes de que te emociones con esa frase inspiradora en sánscrito (que igual significa “pollo al curry”), aquí tienes las 10 cosas imprescindibles que debes saber sobre los tatuajes en pleno 2025.

Porque la información, como la tinta, ¡es para toda la vida!

1. Un arte con raíces milenarias y globales

• El primer tatuaje del que se tiene constancia es el de Ötzi, una momia congelada encontrada en los Alpes con más de 3.000 años de antigüedad.
• Civilizaciones como la egipcia, la polinesia o la japonesa usaban el tatuaje como símbolo de estatus, protección mágica o rito de paso.
• En Norteamérica y América Central, los tatuajes estaban ligados a rituales religiosos y creencias para ahuyentar la muerte o rendir tributo a los dioses.

2. Tecnología: de Edison al láser

• La primera máquina eléctrica para tatuar fue inventada por Thomas Alva Edison a finales del siglo XIX.
• Hoy existen técnicas avanzadas como la micropigmentación (usada desde 1970) para aplicaciones médicas y estéticas.
• La eliminación mediante láser es cada vez más eficaz, aunque sigue siendo un proceso caro y no siempre perfecto.

3. Técnicas para todos los gustos (y umbrales de dolor)

El mundo del tatuaje ofrece una variedad técnica impresionante:

• Lineado: esencial para contornos definidos.
• Coloreado: se empieza por los tonos oscuros hacia los claros, con rigurosa higiene entre cambios.
• Sombreado: juega con negros y grises para efectos tridimensionales.
• Lettering: letras y frases requieren gran destreza tipográfica.
• Handpoke: método manual poco agresivo pero lento, ideal para diseños pequeños.
• Tebori: tradición japonesa manual, bastante dolorosa pero espectacular en grandes superficies como espalda o pecho.

4. Cuestión de piel (y no solo por el arte)

La tinta se deposita en la dermis, una capa rica en colágeno. Con la edad, esa capa pierde elasticidad y firmeza, lo que puede hacer que los tatuajes pierdan definición o se distorsionen con el tiempo. Por eso:

• Si eres mayor de 50 años, es preferible elegir zonas donde la piel sea gruesa y firme (hombros, espalda o abdomen).
• Evita áreas muy expuestas al sol o dañadas para preservar mejor el color.

5. ¿Duele? Sí… pero depende

El dolor del tatuaje varía según la zona corporal, el grosor de la piel y tu tolerancia personal. Curiosamente:

• La piel fina suele ser más sensible.
• El dolor tiende a aumentar con la edad debido a cambios cutáneos.

6. El sol: enemigo número uno del color

Los rayos UV degradan los pigmentos rápidamente. Por eso es vital usar protector solar sobre el tatuaje recién curado para evitar que se apague o distorsione con el tiempo.

7. Cuidado con las modas… y las supersticiones

En algunos países sigue habiendo restricciones legales: en lugares como Irán, Turquía o Emiratos Árabes están prohibidos; incluso en Oklahoma (EE.UU.) lo estuvieron hasta 2006. Además:

• Se dice que tatuarse en pareja o tener un número par de tatuajes da mala suerte (mitos aparte).
• Las mujeres son mayoría entre los tatuados… pero también lideran el ranking de arrepentimientos y eliminaciones láser.

8. Higiene ante todo: tu salud lo primero

Un estudio profesional debe cumplir estrictas normas sanitarias:

• Esterilización rigurosa del material.
• Uso obligatorio de guantes y mascarilla.
• Vacunación contra hepatitis B recomendada para quienes trabajan en estudios.
  No improvises: tu piel merece seguridad.

9. Tatuajes encubridores: cuando tapar es crear

El arte del “cover up” permite transformar un diseño antiguo o fallido en uno nuevo gracias a técnicas avanzadas que juegan con capas y colores específicos para camuflar lo anterior sin dañar la piel ni saturarla innecesariamente.

10. Récords insólitos: cuando más es más

El hombre más tatuado del mundo es Gregory Paul McLaren, quien lleva prácticamente el 99,9% de su cuerpo cubierto –incluyendo párpados, boca y orejas– y figura en el libro Guinness por ello. Y si buscas inspiración tribal… Nueva Zelanda lidera como país más tatuado gracias a sus raíces maoríes.

Tatuarse hoy: entre tendencia y autodefinición

El mundo del tatuaje nunca ha sido tan diverso ni tan accesible como ahora. Hay opciones artísticas para todos los gustos: desde minimalistas hasta maximalistas; desde homenajes familiares hasta expresiones filosóficas; desde técnicas manuales ancestrales hasta robots ultramodernos.

Lo importante es recordar que un tatuaje es una decisión duradera: requiere reflexión sobre diseño, zona corporal e implicaciones sociales o laborales según cada contexto cultural. Y si te animas… no olvides hidratar bien tu piel antes y después; tu lienzo corporal lo agradecerá.

En resumen:

• Elige artista e idea sin prisas.
• Prioriza higiene.
• Protege tu obra del sol.
• Y presume con orgullo esa historia personal escrita en tu piel.

¿Quién dijo miedo? Porque si algo está claro es que cada vez somos más quienes llevamos historias… bajo la epidermis.