La cantante indonesia Irma Bule, de 29 años, falleció el pasado 3 de abril después de que una cobra la mordiera en pleno concierto.
La joven siguió cantando durante 45 minutos después de que el animal -que solía emplear como un aliciente llamativo más en sus espectáculos- le picase durante la actuación. Fue entonces cuando colapsó y se desmayó, según informan los medios de Yakarta.
Bule era conocida en Indonesia por utilizar animales durante sus espectáculos, algo que por otro lado es común en el país, sobre todo en entornos rurales, donde los artistas bailan sobre todo con reptiles como una forma de amenizar los conciertos.
Es especialmente habitual en el género al que se dedicaba la fallecida, el dangdut, y que juega con lo insólito y lo extremo como manera de llamar la atención por encima de otros intérpretes.
La cobra aún tenía los colmillos y su carga de veneno, por lo que la picadura era potencialmente mortal (estos animales son capaces de matar a un elefante con su mordedura).
Tras el incidente, Irma Bule siguió cantando durante tres cuartos de hora, tras lo que comenzó a tener problemas, vomitó y finalmente se derrumbó sobre el escenario. A pesar de ser trasladada al hospital finalmente falleció.
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