El lado más personal de Luka Modric: Vanja Bosníc, sus hijos y su imperio fuera del fútbol

A 23 de mayo de 2025, mientras el césped del Santiago Bernabéu se prepara para despedir a una de sus mayores leyendas, Luka Modric, el croata sigue siendo noticia no solo por su legado en el fútbol, sino también por la vida reservada y sólida que ha construido lejos del ruido mediático. Pese a los focos constantes sobre su figura, Modric ha conseguido lo que muy pocos: mantener su núcleo familiar al margen del circo futbolístico, ofreciendo un ejemplo poco habitual en la élite deportiva actual.

La clave de este equilibrio tiene nombre propio: Vanja Bosníc, su esposa desde hace quince años. Nacida en Varaždin pero criada en Kutina, Vanja es economista y fue agente deportiva antes de convertirse en la pieza fundamental —y casi invisible— en la carrera y la vida personal del mediocentro croata. Su historia juntos comenzó como suelen hacerlo las buenas novelas: con una conversación telefónica interminable y un flechazo profesional que pronto se tornó sentimental. Desde entonces, han compartido éxitos, mudanzas internacionales y tres hijos que completan la familia más protegida (y envidiada) de La Moraleja.

Vanja Bosníc: mucho más que la “mujer de Modric”

Lejos del estereotipo de acompañante pasiva, Vanja ha sido el motor silencioso detrás de muchos de los grandes pasos de Luka. Graduada en Economía por la Facultad de Zagreb, empezó trabajando en la agencia deportiva Mamic, donde conoció a Modric cuando este era una promesa del Dinamo. Aquella llamada inaugural, que duró más de tres horas, fue el principio de una relación profesional que rápidamente se tornó personal y definitiva.

Vanja no solo fue su compañera sentimental sino también su representante oficial durante años —con licencia FIFA— y la responsable directa de operaciones tan trascendentales como el fichaje por el Real Madrid en 2012. Su visión empresarial ha sido decisiva tanto para las negociaciones deportivas como para los negocios familiares. De hecho, tras dejar la agencia Mamic, se volcó primero en asegurar los intereses futbolísticos de Luka y después en gestionar su transición hacia otras facetas empresariales.

Pese a su influencia —y a los millones que gestiona en inversiones inmobiliarias— Vanja prefiere mantenerse en un discreto segundo plano. No tiene perfiles públicos en redes sociales y solo aparece muy ocasionalmente en las publicaciones familiares del croata. Con 43 años recién cumplidos este verano, se ha convertido para muchos en el ejemplo perfecto de cómo compaginar éxito profesional y vida privada sin ceder ante los excesos mediáticos.

Tres hijos y una vida tranquila (pero nada aburrida) en Madrid

El matrimonio reside desde hace más de una década en La Moraleja, uno de los barrios más exclusivos de Madrid. Allí disfrutan junto a sus tres hijos: Ivano (nacido en 2010), Ema (2013) y Sofía (2017). El mayor ya empieza a despuntar en categorías inferiores del fútbol madrileño; las pequeñas Ema y Sofía, aunque menos expuestas a los medios, son protagonistas habituales (y consentidas) durante las celebraciones familiares o las fiestas navideñas.

Modric siempre ha destacado cómo la paternidad le cambió la perspectiva vital. En entrevistas recientes asegura que “la familia es lo primero” y que cada título o premio individual pierde brillo si no puede compartirlo con ellos. La familia intenta mantener rutinas normales pese al magnetismo mediático: colegio internacional para los niños, deportes extraescolares y escapadas discretas al Adriático cada verano. Nada que ver con el ritmo frenético o las excentricidades habituales entre los grandes astros del balón.

Los negocios fuera del campo: cerveza artesanal e inversiones inmobiliarias

El futuro profesional del croata parece asegurado gracias a dos pilares fuera del fútbol: el sector inmobiliario y un reciente desembarco cervecero digno de cualquier emprendedor moderno. Por un lado, Modric ha invertido varios millones en propiedades tanto en España como Croacia; junto a Vanja controla un patrimonio millonario destinado a garantizar estabilidad cuando cuelgue las botas.

Por otro lado, a principios de 2025 sorprendió al convertirse en copropietario de la cervecera artesanal Zeppelin Craft Brewery, ubicada cerca de Zagreb. Especializada en cervezas sin pasteurizar ni filtrar —todo muy hipster— esta empresa cuenta también con otro exfutbolista entre sus socios y planea lanzar próximamente una edición limitada dedicada al propio Luka Modric. El negocio promete no solo rentabilidad sino también imagen: ¿quién no querría brindar con una “Modric Lager” tras un clásico?.

Pronósticos e incertidumbres tras su adiós al Bernabéu

El sábado 24 de mayo será probablemente el último partido oficial de Modric como jugador blanco ante la Real Sociedad; las apuestas apuntan a una salida emotiva pero sin grandes aspavientos ni discursos lacrimógenos —muy propio del carácter reservado del croata—. ¿Y después? Hay quien apuesta por verlo ligado al club desde otro puesto o incluso como embajador internacional mientras consolida su perfil empresarial.

En cualquier caso, lo único seguro es que contará con el apoyo incondicional —y estratégico—de Vanja Bosníc y el abrazo siempre sincero de sus tres hijos.

“Ser padre me ha hecho mejor persona; mi familia es mi mayor título”, confesó Luka hace apenas unos meses.

Curiosidades sobre Luka Modric, Vanja Bosníc y familia

• La pareja se casó dos veces: primero por lo civil (embarazada Vanja) y después por lo religioso.
• Vanja negoció personalmente todos los contratos “grandes” de Luka desde 2010.
• Ivano ya ha levantado varias mini-copas acompañando a su padre sobre el césped.
• Su casa madrileña tiene casi 700 metros cuadrados… pero lo importante es la portería improvisada para los partidos familiares.
• Modric es copropietario también de varios apartamentos turísticos cerca del mar Adriático.
• A pesar del perfil bajo mediático, Vanja es considerada por muchos agentes deportivos como una negociadora “implacable”.
• La cerveza artesanal Zeppelin podría lanzar pronto una edición “Balón de Oro” dedicada al croata.