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Escándalo judicial sacude al Athletic y a LaLiga

Los hermanos Williams, bajo sospecha: imputados por estafa en la adquisición de un Mercedes de lujo

Nico e Iñaki Williams deberán declarar como imputados en enero de 2026 tras la querella de una empresa navarra que denuncia la adquisición fraudulenta de un Mercedes AMG E63

Periodista Digital 31 Jul 2025 - 02:09 CET
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Jugar al fútbol lo hacen de maravilla.

Otras cosas, ya no tanto.

El Athletic Club y sus seguidores amanecen con la resaca de un escándalo inesperado que golpea el corazón del vestuario rojiblanco.

Los hermanos Iñaki y Nico Williams, símbolos del equipo vasco y figuras mediáticas del fútbol español, se encuentran ahora en el centro de una investigación judicial por un presunto delito de estafa y apropiación indebida relacionado con la adquisición de un coche de alta gama, concretamente un Mercedes AMG E63 valorado entre 80.000 y 230.000 euros según fuentes del sector automovilístico español.

La noticia ha caído como una bomba en Bilbao, donde ambos futbolistas —referentes para la afición y motores del actual proyecto deportivo— deberán declarar en calidad de imputados el próximo 27 de enero de 2026 ante el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 2 de Aoiz (Navarra).

El caso promete ser uno de los procesos judiciales más mediáticos del fútbol nacional en los próximos meses.

El origen del caso: permutas, intermediarios y un coche que nunca cambió de manos

La historia arranca en octubre de 2024, cuando la empresa navarra Omnigestión 24 SLU adquiere en Bélgica el Mercedes AMG E63 por unos 77.000 euros, un modelo difícil de encontrar en el mercado español. Según la querella presentada en marzo de este año, la operación con los Williams se planteó como una permuta: los futbolistas cederían su propio Mercedes CLA 45 a cambio del codiciado AMG E63.

En la negociación intervino un intermediario, Houssni Talhaoui Ichouyab, y para formalizar el intercambio se simuló una compraventa a nombre de Mary Princie Fripomaah, tía de los jugadores. El detalle relevante: la supuesta compradora carecía totalmente de solvencia económica, lo que dificultaría cualquier intento posterior por parte de Omnigestión para recuperar el vehículo si surgían problemas legales.

El acuerdo incluía gestos propios del fútbol profesional: Nico Williams asumió los gastos de matriculación y llegó a invitar al representante empresarial al palco privado del Athletic en San Mamés para ver un partido juntos, afianzando así la confianza entre las partes. Sin embargo, tras recibir el Mercedes AMG E63 y registrarlo a nombre de su tía insolvente, los hermanos Williams nunca entregaron su CLA 45 ni completaron los trámites legales para formalizar el cambio de titularidad. El resultado: Omnigestión perdió el control sobre el vehículo y sufrió un daño económico considerable.

La querella: acusaciones graves y una cita judicial decisiva

La empresa denunciante sostiene que los jugadores urdieron “un plan fraudulento para apropiarse del vehículo sin pagar ni entregar contraprestación alguna”, señalando directamente su “propósito criminal” al utilizar la figura insolvente de su tía como pantalla jurídica para dificultar cualquier reclamación posterior. La jueza Amaya Morea ha admitido a trámite la querella por presunta estafa y apropiación indebida, citando a los implicados a declarar en enero bajo condición de investigados.

El juzgado también ha llamado a declarar al intermediario Houssni Talhaoui Ichouyab y a Mary Princie Fripomaah. Todos ellos tendrán que responder sobre su papel en la operación y sobre la ausencia total del CLA 45 prometido por los Williams.

Reacciones: silencio institucional, expectación mediática y humor negro

Desde el Athletic Club reina el silencio absoluto mientras las redes sociales hierven con comentarios ácidos sobre el caso. No faltan quienes ironizan con que “la mejor jugada del año” no se vio en San Mamés sino en una notaría navarra. Incluso algún aficionado recuerda que Nico Williams estrenó hace poco otro coche deportivo —un Porsche GT3 valorado en más de 200.000 euros— adquirido legalmente en Valladolid, lo que añade más leña al fuego sobre su afición por los vehículos exclusivos.

Entre tanto, Iñaki Williams había debutado hace solo unas horas como primer capitán del equipo antes de que estallara el escándalo judicial. La paradoja no pasa inadvertida para nadie: mientras defendía valores como el compromiso social desde el atril, se conocía su imputación por uno de los delitos económicos más mediáticos del fútbol reciente.

Análisis legal y deportivo: antecedentes y posibles escenarios

No es frecuente ver a estrellas futbolísticas españolas sentadas ante un juez por delitos económicos tan graves. Sin embargo, el precedente europeo (recordemos casos similares que han afectado a figuras internacionales) sugiere cautela antes de anticipar consecuencias deportivas inmediatas.

Las casas de apuestas aún no han publicado cuotas específicas sobre las probabilidades judiciales (por ahora), pero sí anticipan impacto mediático prolongado hasta enero como mínimo.

Por otro lado:

Curiosidades sobre el caso Williams

El desenlace judicial está abierto… pero lo que nadie duda es que este verano rojiblanco será recordado tanto fuera como dentro del terreno de juego.

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