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juliana, indefensa, sobrevivió de milagro

Arrestan al exjugador Igor Cabral tras propinar 61 brutales puñetazos a su novia en un ascensor

Intentan reconstruir con cirugía estética el rostro de la chica, en un caso que conmociona a la opinión pública brasileña

Periodista Digital 01 Ago 2025 - 13:30 CET
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Brutal.

Indignante.

Sadismo del peor.

La noticia ha sacudido a la sociedad brasileña: Igor Cabral, exjugador profesional de baloncesto, ha sido arrestado en Natal tras un violento ataque a su pareja, Juliana García dos Santos, en el ascensor de un edificio.

El suceso, grabado por cámaras de seguridad, muestra cómo Cabral asesta 61 puñetazos en apenas un minuto, dejando imágenes que han desatado indignación y debate sobre la violencia machista en Brasil.

El incidente ocurrió el pasado sábado, 26 de julio de 2025, cuando el deportista, de 29 años, agredió sádicamente a Juliana, de 35, en un episodio que terminó con la intervención de vecinos y la detención inmediata del exatleta por la policía local.

La víctima sufrió graves lesiones: fracturas en la mandíbula, la nariz, el pómulo y la órbita ocular, según los primeros partes médicos.

Actualmente, permanece ingresada y se ha pospuesto su cirugía reconstructiva debido a la gravedad de las heridas y el edema facial.

 

Un ataque documentado por cámaras y la reacción social

Las imágenes, que se han difundido ampliamente en redes sociales y medios, muestran a Cabral golpeando de forma ininterrumpida a su pareja, que apenas puede defenderse. El vídeo ha tenido un efecto inmediato: no solo ha provocado la repulsa de la opinión pública, sino que también ha motivado un mensaje de la propia Juliana dirigido a otras mujeres, instando a detectar las señales de abuso y a no tolerar situaciones de violencia.

En el entorno del edificio, fue clave la intervención de los vecinos y la rápida actuación de un guardia de seguridad, que alertó a la policía nada más ver las imágenes en tiempo real. Cuando el ascensor llegó a la planta baja, varios residentes lograron retener a Cabral hasta la llegada de los agentes.

La agresión no fue un hecho aislado, según ha contado la víctima en medios brasileños. Juliana ha relatado episodios previos de empujones y abusos psicológicos, y ha afirmado que la relación llevaba tiempo marcada por el control y los celos. El detonante del ataque, según amigos de la pareja, habría sido una discusión por mensajes en el teléfono de la joven.

El rostro de Juliana tras la paliza

Perfil de Igor Cabral: del baloncesto profesional a la prisión

Igor Eduardo Pereira Cabral desarrolló su carrera en la selección brasileña de baloncesto 3×3 y en la Liga Nacional, donde llegó a ser considerado una promesa del deporte. Su nombre, hasta ahora vinculado a las canchas, ha pasado a estar asociado a la crónica negra tras este incidente. Cabral, que se encuentra en prisión preventiva mientras avanza la investigación, justificó su comportamiento alegando un ataque de claustrofobia, versión que no ha convencido ni a la policía ni al entorno de la víctima.

Entre los detalles menos conocidos de la vida de Cabral destacan:

Juliana García: la voz de la víctima y la denuncia social

A pesar de la gravedad de las lesiones, Juliana García ha decidido alzar la voz. En declaraciones a TV Record, ha explicado que antes del ataque en el ascensor ya había vivido situaciones de abuso psicológico y físico. Subraya la importancia de no ignorar los primeros signos de violencia: «Se trata de mantenerse alerta y, ante cualquier señal, irse y no volver jamás».

La repercusión del caso ha sido tal que la jueza de la audiencia de custodia se negó a ver el vídeo íntegro por la crudeza de las imágenes, limitándose a decretar la prisión provisional del agresor.

Lista de anécdotas y curiosidades sobre los protagonistas:

Reacciones y contexto social

El caso de Igor Cabral ha reabierto el debate en Brasil sobre la violencia contra las mujeres y la necesidad de reforzar la protección y la prevención. Organizaciones feministas y asociaciones civiles han pedido endurecer las penas y mejorar los mecanismos de denuncia.

En cifras:

La defensa del exjugador ha solicitado que se le traslade a una celda aislada tras recibir amenazas de otros internos, en un clima de fuerte tensión mediática y social.

Conclusión abierta: una herida social que no cicatriza

El brutal ataque de Igor Cabral a Juliana García, con 61 puñetazos en un ascensor, no es solo un caso aislado de violencia de pareja. Es el reflejo de un problema estructural en la sociedad brasileña y una llamada de atención para la prevención, el acompañamiento y la denuncia ante cualquier indicio de maltrato. La historia de Juliana, su fortaleza y su mensaje, pueden servir de punto de inflexión para muchas mujeres que aún sufren en silencio.

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