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El equipo letrado de Daniel Sancho compuesto por Carmen Balfagón y Ramón Chipirrás junto a Marcos García Montes han convocado una rueda de prensa sobre la situación penal del joven español acusado en Tailandia de matar y descuartizar al cirujano colombiano Edwin Arrieta. El juicio contra Sancho arrancará en Tailandia el próximo 9 de abril.
Los abogados de Daniel Sancho buscan la nulidad de las actuaciones policiales, argumentando la falta de respaldo normativo en materia de derechos humanos. García Montes, portavoz del equipo legal, expresa confianza en el enfoque garantista adoptado por los tribunales tailandeses en relación con los derechos fundamentales.
Carmen Balfagón ha enseñado a los medios convocados una fotografía donde se puede ver a Sancho comiendo rodeado de policías, porque iba a colaborar en la investigación a cambio de la deportación.
Estas son las declaraciones más impactantes que han realizado:
«Se le promete la deportación en un plazo de 48 horas. Daniel declara que había habido una pelea y un intento de agresión sexual, y como resultado se da el fallecimiento de la víctima. Las grabaciones aseguran que lo dice desde el minuto uno. La policía manipula esta declaración de Daniel, según los abogados»
«Daniel no compró nada para matar a nadie, ya dijo que compró ese material para hacer unos vídeos de cocina».
«Ahora lo entendemos: le prometieron algo por colaborar, y la policía transcribió otra cosa».
«Tenemos que apoyar como primera medida a una persona que ha cometido que de momento no se ha actuado en cuanto a sus derechos como se podría haber actuado, Nadie tiene derecho a cambiar una declaración. Ahora puedo decir que todas esas personas que habían acusado de asesino confeso a Daniel, estaban equivocados. Tenemos plena confianza en la justicia tailandesa, pero la actuación de la policía es una vergüenza«.
Daniel Sancho.
«La Policía filtra que ha habido una pelea y que Daniel tenía lesiones. Las lesiones no son de una pelea, sino de una agresión. Son lesiones de defensa».
«La policía filtró a los medios de comunicación, llamando a los medios de comunicación desde Tailandia, y luego procesalmente cuando empieza el derecho de defensa es cuando nos llama el presidente de la corte y nos dice lo que pide el fiscal. Hasta entonces todo es críptico. En ese momento es cuando le leen sus derechos».
«Con respeto a los derechos humanos, el juez recibe la comunicación de Daniel pidiendo un letrado de oficio y que tiene derecho a que se le dé la acusación del fiscal en español. Su idioma es el español. Podemos contrariar por qué él habló en inglés con un traductor, pero él tiene un inglés de andar por casa. Si una persona se enfrenta a un proceso, tiene derecho a que se le comunique en su idioma».
«No se le lee ningún derecho fundamental a que elija abogado, se le pone uno de oficio. Se le lleva en un largo peregrinaje en el que el abogado de oficio ni aparece y hace una reconstrucción de hechos absolutamente cavernícola en la que le dicen lo que tiene que decir en inglés. Todo esto no tiene ningún valor procesal».
«El Código Penal tailandés habla de asesinato con premeditación y otro artículo habla de la muerte de una persona con lesiones, el homicidio simple, tiene una pena de 3 a 15 años. Desde el punto de vista mediático, es muy jugoso hablar del descuartizamiento, pero este es un delito de profanación de cadáveres que no tiene nada que ver con los anteriores. Produce reproche, pero no tiene nada que ver con la calificación de asesinato u homicidio».
«Estamos en unos hechos que darían lugar a un homicidio imprudente, que en España sería considerado un accidente: me intentan violar, me muerden, me defiendo, se cae y se produce la muerte, por lo que no se produce responsabilidad penal». En este sentido, según los abogados, Daniel estaría en España en 3 o 4 años».
«Se entra en el lugar donde supuestamente se produce la muerte, y a los 2 minutos en los que no hay precinto, entran las cámaras de televisión. No hay ninguna prueba de que hubiera un cuchillo en la muerte. No hay pruebas porque la autopsia no lo ha probado»
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