Detenido un inmigrante ilegal magrebí tras quemar viva a una menor tutelada en Las Palmas

El barrio de La Isleta, en Las Palmas de Gran Canaria, despertó este miércoles con una noticia que hiela la sangre: Abarrafia Hader, joven marroquí de 20 años, fue detenido tras prender fuego a una menor tutelada de 17 años.

El suceso, ocurrido a las 4:00 de la madrugada en una vivienda ocupada ilegalmente, ha dejado a la víctima ingresada en estado crítico con quemaduras en el 95% de su cuerpo.

Los servicios de emergencia atendieron primero a la chica en plena calle, donde apenas podía hablar pero logró señalar al joven como responsable directo del ataque.

La escena resulta dantesca. La menor, completamente envuelta en llamas, salió del inmueble arrastrándose y balbuceando: “Ha sido él”.

Los sanitarios la trasladaron al Hospital Universitario Doctor Negrín antes de evacuarla urgentemente a la Unidad de Quemados del Hospital Virgen del Rocío en Sevilla, ante la gravedad extrema de sus lesiones.

El agresor también fue asistido por síntomas de intoxicación por humo y permanece bajo custodia policial.

Un perfil marcado por la vulnerabilidad y el desarraigo

La víctima es una joven tutelada por el Gobierno de Canarias. Su historial reciente revela episodios de fuga del centro de menores donde residía; la dirección del hogar había denunciado su desaparición días antes y ese mismo martes volvió a activar su búsqueda. Se había refugiado en una casa okupada del barrio junto a Hader, fuera del control institucional y en un entorno degradado, sin agua corriente ni electricidad.

El presunto agresor llegó a Canarias hace mes y medio tras ser rescatado por Salvamento Marítimo cuando viajaba en patera. De origen magrebí, carecía de visado o documentación válida. Tras desembarcar en Arrecife, las autoridades tramitaron una orden de devolución a Marruecos, medida pendiente de ejecución mientras permanecía alojado temporalmente en el antiguo acuartelamiento Canarias 50, convertido en centro para migrantes adultos.

El caso evidencia los vacíos administrativos y sociales que rodean tanto a los jóvenes migrantes como a los menores tutelados que escapan del sistema protector. La investigación policial aún no ha confirmado si existía una relación sentimental formal entre víctima y agresor, aunque diversas fuentes apuntan a que convivían como pareja desde hacía semanas.

Una agresión brutal: así se desencadenó el ataque

Según fuentes policiales y vecinales, Hader roció a la menor con líquido inflamable antes de lanzar un papel ardiendo sobre ella. El fuego se propagó rápidamente y devoró casi toda la superficie corporal de la víctima. El ataque fue tan violento que los investigadores han calificado el caso desde el primer momento como presunta tentativa de asesinato y posible violencia machista.

A pesar del estado crítico de la chica, su testimonio directo ante los agentes resultó clave para identificar al agresor. La Policía Nacional mantiene todas las hipótesis abiertas mientras recaba declaraciones del entorno y trata de reconstruir cómo ambos jóvenes terminaron viviendo juntos y fuera del radar institucional.

Contexto legal, social y psicológico

Este suceso pone sobre la mesa varias cuestiones críticas:

• Desprotección institucional: La incapacidad para localizar y proteger a menores fugados del sistema tutelar.
• Descontrol migratorio: El tránsito libre de personas con órdenes de devolución pendientes.
• Entornos vulnerables: Viviendas okupadas donde conviven jóvenes sin recursos ni supervisión.

Desde el Gobierno canario se reconoce que no existían denuncias previas ni informes que alertaran sobre la convivencia entre ambos jóvenes o posibles episodios violentos previos. Tampoco hay constancia formal sobre una relación sentimental reconocida por las autoridades.

Psicólogos consultados insisten en el alto riesgo que supone para menores sin red familiar ni supervisión vivir expuestos a adultos desconocidos en ambientes hostiles. También advierten sobre el impacto psicológico devastador tanto para la víctima como para quienes presenciaron los hechos.

Perfil del presunto agresor: Abarrafia Hader

• Edad: 20 años
• Origen: Marruecos
• Llegada a España: Hace mes y medio en patera
• Situación legal: Sin visado; orden de devolución pendiente
• Residencia: Centro temporal Canarias 50; vivía ocasionalmente en una casa okupada
• Estado actual: Detenido; hospitalizado por inhalación de humo; bajo custodia policial

Curiosidades y anécdotas

• Hader fue interceptado junto a otros migrantes magrebíes y subsaharianos durante su travesía marítima hacia Canarias.
• Durante su estancia en el centro temporal tenía libertad para entrar y salir durante el día.
• No existen antecedentes policiales conocidos ni denuncias previas relacionadas con episodios violentos o conductas peligrosas.
• El ataque se produjo apenas semanas después de su llegada al territorio nacional.

Reacciones e investigación abierta

Las autoridades han mostrado máxima prudencia ante un caso que ya ha generado un fuerte impacto social e indignación ciudadana. El Gobierno canario investiga posibles fallos administrativos mientras organizaciones especializadas reclaman medidas urgentes para proteger a menores especialmente vulnerables.

El caso sigue abierto. Los investigadores tratan ahora de esclarecer no solo las circunstancias inmediatas del ataque sino también los factores sociales e institucionales que lo han hecho posible.