Singapur: el pequeño y poderoso país que tiene el mejor pasaporte del mundo

Estados Unidos está al borde de salir del top 10 de los pasaportes más poderosos del mundo, según el último informe del Henley Passport Index, elaborado por la consultora Henley & Partners.

De liderar en 2014, el pasaporte estadounidense ha caído al décimo lugar, con acceso sin visado a 182 destinos, su posición más baja en los 20 años de historia del índice, que evalúa la libertad de movimiento de 199 pasaportes en 227 países con datos de la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA).

Singapur reina en el primer puesto en 2025, con acceso sin visado a 193 destinos.

Le siguen Japón y Corea del Sur en el segundo lugar (190 destinos), mientras que países europeos como Dinamarca, Finlandia, Francia, Alemania, Irlanda, Italia y España ocupan el tercero (189 destinos).

En el cuarto puesto están Austria, Bélgica, Luxemburgo, Países Bajos, Noruega, Portugal y Suecia (188 destinos), y en el quinto, Grecia, Suiza y Nueva Zelanda (187 destinos).

En el otro extremo, Afganistán sigue en el último lugar, con acceso a solo 25 destinos, seguido por Siria (27) e Irak (30), mostrando una enorme brecha de movilidad.

Reino Unido cae al sexto puesto (186 destinos), y Emiratos Árabes Unidos, que ha escalado 34 posiciones en una década, está en el octavo (184 destinos). China también sube, del 94 al 60 desde 2015.

Una nueva tasa de “integridad de visado” de al menos 250 dólares en EE. UU. ha generado críticas por desincentivar el turismo. Según Christian H. Kaelin, presidente de Henley & Partners, los países con diplomacia activa y acuerdos de exención de visado lideran, mientras que los menos comprometidos pierden terreno.

Los pasaportes más poderosos de 2025:

• Singapur (193 destinos)
• Japón, Corea del Sur (190)
• Dinamarca, Finlandia, Francia, Alemania, Irlanda, Italia, España (189)
• Austria, Bélgica, Luxemburgo, Países Bajos, Noruega, Portugal, Suecia (188)
• Grecia, Nueva Zelanda, Suiza (187)
• Reino Unido (186)
• Australia, República Checa, Hungría, Malta, Polonia (185)
• Canadá, Estonia, Emiratos Árabes Unidos (184)
• Croacia, Letonia, Eslovaquia, Eslovenia (183)
• Islandia, Lituania, Estados Unidos (182)

UN VIAJE A SINGAPUR

Viajar a Singapur es una invitación a descubrir cómo una pequeña isla puede convertirse en un referente mundial, no sólo por su economía vibrante y su sorprendente arquitectura, sino también por ostentar el pasaporte más poderoso del mundo en 2025.

Esta ciudad-estado ofrece acceso sin visado a 193 países, lo que habla de su peso diplomático y la confianza internacional que inspira. Pero más allá de cifras y rankings, el verdadero motivo para visitar este destino radica en su capacidad de reinventarse a cada paso, en su convivencia ejemplar de tradiciones y modernidad, y en la diversidad cultural que se respira en cada rincón.

Pasear por Singapur es sumergirse en un crisol de culturas asiáticas y occidentales, con barrios como Little India, Chinatown y Kampong Glam que invitan a perderse entre templos, mercados y cafés.

Aquí, la mezcla de religiones, lenguas y costumbres es palpable y se refleja en la gastronomía, la arquitectura y la vida cotidiana.

El visitante siente que cada día puede ser distinto: desde admirar el perfil futurista de Marina Bay Sands hasta disfrutar la calma de los Jardines Botánicos, pasando por degustar un plato de laksa en un hawker centre o sorprenderse con el espectáculo de luces del Supertree Grove.

Cómo llegar desde España

El trayecto desde España a Singapur implica un vuelo largo, generalmente con una o dos escalas, aunque algunas compañías aéreas ofrecen rutas directas desde ciudades europeas cercanas como Londres, Frankfurt o Ámsterdam, lo que facilita la conexión. El destino final es el aeropuerto Changi, considerado uno de los mejores del mundo, que sorprende incluso antes de pisar la ciudad con su cascada interior y jardines temáticos. El viaje suele durar entre 14 y 17 horas, dependiendo de las escalas y el aeropuerto de salida.

Documentación necesaria y requisitos de entrada

Para los viajeros con pasaporte español, la entrada a Singapur como turista es sencilla: no se requiere visado para estancias de hasta 90 días, siempre que el pasaporte tenga una validez mínima de seis meses a partir de la fecha de entrada. Es imprescindible presentar el billete de salida o continuación de viaje y demostrar fondos suficientes para la estancia. A la llegada, se debe completar la Electronic Arrival Card de manera online antes de pasar por inmigración. Hay que recordar que las autoridades locales son estrictas con las normas: está prohibido introducir chicles, tabaco de mascar y ciertos medicamentos sin receta.

Moneda, precios y presupuesto para dos personas

La moneda oficial es el dólar de Singapur (SGD). La ciudad tiene fama de cara, pero ofrece alternativas para todos los bolsillos. Un presupuesto medio para dos personas, incluyendo alojamiento en hotel de gama media, comidas en restaurantes locales, transporte y entradas a atracciones, ronda los 180-250 euros diarios. Comer en un hawker centre cuesta entre 4 y 8 euros por persona, mientras que una cena en restaurante de nivel medio oscila entre 25 y 40 euros por persona. Las entradas a lugares emblemáticos como Gardens by the Bay o el SkyPark del Marina Bay Sands tienen precios entre 15 y 25 euros.

Tabla orientativa de precios (para dos personas):

Medios de transporte: moverse por Singapur

Moverse por la ciudad es sorprendentemente sencillo gracias a su red de transporte público: el MRT (metro) es puntual, limpio y conecta los principales barrios y atracciones. Los autobuses cubren trayectos más específicos y resultan cómodos incluso para trayectos cortos. Para mayor comodidad, conviene adquirir la tarjeta recargable EZ-Link o el Singapore Tourist Pass, que permite viajes ilimitados por un número determinado de días. Los taxis son seguros y eficientes, aunque más caros en horas punta o por la noche. El coche de alquiler no es recomendable debido al tráfico y el alto coste del aparcamiento.

Mejor estación del año para visitar

El clima de Singapur es tropical, cálido y húmedo durante todo el año, con temperaturas entre 26 y 32 °C. Sin embargo, la mejor época para visitarlo es durante la estación seca, de febrero a abril, cuando las lluvias son menos frecuentes y se disfruta más de las actividades al aire libre. Los meses de noviembre a enero corresponden al monzón, con precipitaciones abundantes que pueden condicionar los planes. La temporada alta abarca de junio a agosto, coincidiendo con festivales, rebajas y mayor afluencia de turistas, lo que encarece los precios. Si buscas tranquilidad y tarifas más bajas, agosto y septiembre son buenas opciones, aunque hay riesgo de lluvias esporádicas.

Restaurantes imprescindibles y gastronomía local

La oferta culinaria de Singapur es inabarcable. Algunos restaurantes han obtenido estrellas Michelin, pero la verdadera esencia está en los hawker centres, mercados cubiertos donde se sirve comida local a precios asequibles. El Maxwell Food Centre es famoso por su chicken rice, mientras que en Lau Pa Sat se puede probar satay en plena calle al caer la noche. Para experiencias más sofisticadas, Odette y Burnt Ends destacan en la lista de los mejores restaurantes de Asia. No hay que dejar pasar el chilli crab, el laksa o el kaya toast con café local en un desayuno típico.

Lista de recomendaciones imprescindibles:

• Maxwell Food Centre: arroz con pollo, laksa, zumos tropicales.
• Lau Pa Sat: satay, mariscos, ambiente nocturno.
• Hawker Chan: el primer puesto de comida callejera con estrella Michelin.
• Odette: alta cocina francesa con ingredientes locales.
• Burnt Ends: barbacoa contemporánea en formato degustación.

Claves y trucos para disfrutar al máximo

• Lleva ropa ligera y transpirable, pero ten siempre a mano un paraguas o chubasquero por las lluvias repentinas.
• Respeta las normas: tirar basura o masticar chicle en lugares públicos puede conllevar multas elevadas.
• Utiliza el transporte público para evitar atascos y ahorrar tiempo.
• Planifica las visitas a las principales atracciones con antelación, sobre todo en temporada alta.
• Prueba la comida en hawker centres para descubrir la auténtica cocina local y ahorrar en el presupuesto diario.
• Activa una eSIM local o compra una tarjeta SIM para mantenerte conectado y consultar mapas o información útil durante el viaje.
• Si viajas con niños, el Singapore Zoo y el S.E.A. Aquarium en Sentosa son paradas imprescindibles.

Curiosidades y anécdotas de Singapur

• El pasaporte de Singapur es el más poderoso del mundo en 2025, con acceso sin visado a 193 destinos.
• La ciudad prohíbe la venta de chicle desde 1992, salvo para uso terapéutico.
• Los jardines verticales del Supertree Grove almacenan energía solar y sirven de sistema de refrigeración natural.
• El aeropuerto Changi alberga la cascada interior más alta del mundo y jardines de mariposas y girasoles.
• En los parques y calles existen puntos de «Shared Umbrellas»: si llueve, puedes coger un paraguas y dejarlo en otro punto de la ciudad al finalizar tu trayecto.
• El Singapore Flyer es una de las norias más altas del mundo, con vistas panorámicas de la bahía y, en días despejados, de Malasia e Indonesia.

Un viaje a Singapur: modernidad, orden y diversidad

La experiencia de viajar a Singapur trasciende la imagen de ciudad futurista. Aquí, la convivencia de culturas y religiones es un hecho cotidiano, y la convivencia se traduce en respeto a las normas, limpieza extrema y una sensación de seguridad poco habitual en grandes urbes. Cada día ofrece una nueva perspectiva: desde la serenidad de los templos hindúes en Little India hasta la vibrante vida nocturna en Clarke Quay. El visitante descubre que el atractivo de este destino no está sólo en sus rascacielos o centros comerciales, sino en la suma de detalles: la amabilidad de sus gentes, la eficiencia de su transporte, la sorpresa de encontrar arte urbano en un callejón o el placer de un plato de noodles compartido en una mesa comunal.

Visitar Singapur significa también comprender el valor de la convivencia, la innovación y el respeto por la diversidad. Y, por supuesto, disfrutar de la facilidad de moverse por el mundo con el pasaporte más poderoso, un reflejo de la apertura y confianza que esta isla proyecta al exterior.