El trapacero Sánchez intenta distraer con Montoro pero el Supremo le abofetea con Cerdán

Nada le sale bien a Pedro Sánchez.

El presidente del Gobierno ‘en fuga’ ha reaparecido en Uruguay para intentar aprovechar el caso Montoro y distraer de los escándalos de corrupción de su círculo íntimo, de su PSOE y de su Ejecutivo.

Pese a intentar aplicar su ya clásica contorsión dialéctica e hipocresía supina, el marido de Begoña no puede escapar a lo evidente: que el fango de los chanchullos de su banda del Peugeot y de su familia —de sangre y política— le hunde cada vez más.

Al día siguiente de intentar enarbolar el ‘y tú más’, ha venido un auténtico bofetón por parte del Tribunal Supremo: mantiene la prisión preventiva de quien era su mano derecha, Santos Cerdán, por riesgo de destrucción de pruebas y liderazgo en la trama de corrupción socialista.

Por si fuera poco, en lo político se encuentra cada vez más debilitado, como lo demuestra la sesión de ayer en el Congreso de los Diputados. En la ‘celebración’ de la mitad de la legislatura —en la que, además de no asistir él, tampoco lo hicieron 14 de sus ministros—, se impuso el “no” a su decreto ley antiapagones, demostrando que no tiene ni mayoría social ni parlamentaria. Y eso que dejaron fuera la llamada ley Bolaños y la reducción de la jornada laboral porque Junts ya había advertido que votaría en contra de todas las propuestas.

Sánchez suma más de cien derrotas parlamentarias en toda la legislatura, dejando claro que es un mandatario incapaz de gobernar, siendo la falta de Presupuestos el ejemplo más claro de ello. Sin embargo, el líder del PSOE sigue firme en su intención de mantenerse hasta —al menos— 2027.

Estos y otros temas de actualidad son tratados este miércoles, 23 de julio, en otra edición especial del ‘24×7’, esta vez presentada por Eurico Campano, con el concejal del Partido Popular en el Ayuntamiento de Madrid, Juan Peña, como invitado.