El PSOE se derrumba bajo los pies de un Sánchez pringado en la corrupción y el abuso sexual

Lo que no sabemos todavía es cuánto dinero del sufrido contribuyente español nos ha costado la broma, pero la realidad es que Pedro Sánchez ha sido elegido Persona del Año por la revista italiana L’Espresso.

El galardón al marido de Begoña, otorgado por la izquierdista L’Espresso, llega en pleno escándalo de la trama PSOE, con corrupción, abusos sexuales y encarcelamientos a diario y creciendo.

Es tan chistoso, que alguno sugiere —y con razón— que si querían premiar al caradura, hubiera sido más sensato y menos descarado nominarlo como Zombie del Año, porque Sánchez es un moribundo.

Un político agonizante que, además de ocasionar un enorme daño a nuestro país, arrastra al PSOE a una penosa, merecida y muy prolongada travesía del desierto. O a la extinción, que sería lo mejor para España.

La imagen resulta ya insostenible, incluso para los más leales: un PSOE acosado por la corrupción y una oleada de denuncias de acoso sexual, con Sánchez en el ojo del huracán.

La sucesión de casos, sobresaltos judiciales y dimisiones forzadas ha creado en el partido una sensación de desmoronamiento que muchos dirigentes describen, en privado, mediante una metáfora recurrente: “parecemos el Titanic”.

Lo que hace solo unas semanas se consideraba otra crisis más en un complicado final de año ha evolucionado hacia la mayor crisis interna del PSOE desde que Sánchez llegó a la Moncloa, según coinciden diversas fuentes socialistas.

La mezcla de investigaciones por corrupción que ya han alcanzado sedes ministeriales y el goteo de denuncias por presunto acoso sexual dentro de la organización han transformado la dinámica política tanto del Gobierno como del propio partido: ya no se debate solo sobre la gestión, sino sobre la coherencia ética de un proyecto que se jactaba de ejemplaridad y feminismo militante.

Un ‘Me Too’ que dinamita el relato feminista

El epicentro de esta conmoción interna tiene nombre y apellidos: Francisco (Paco) Salazar, quien hasta hace poco era uno de los hombres fuertes dentro del socialismo. El conocido caso Salazar ha actuado como catalizador para una serie de denuncias por presunto acoso sexual que han afectado a dirigentes en varias federaciones, desde José Tomé en Lugo hasta cargos locales en Córdoba, pasando por figuras destacadas dentro de la estructura orgánica nacional.

En las últimas semanas se ha ido conformando un listado incómodo para Ferraz:

• Paco Salazar, ex dirigente orgánico muy cercano a la dirección, actualmente bajo investigación interna por presunto acoso a varias militantes.
• José Tomé, presidente de la Diputación de Lugo, apartado tras recibir una denuncia de acoso sexual presentada ante la dirección del partido.
• Antonio Navarro y otros cargos intermedios implicados en comportamientos machistas o situaciones de acoso en diferentes territorios.
• Alcaldes y responsables locales como el de Belalcázar (Córdoba), Francisco Luis Fernández Rodríguez, obligados a dimitir tras denuncias similares.

Incluso los medios cercanos al Gobierno reconocen que el PSOE está atravesando un verdadero “carrusel” de casos, con “desánimo”, “cabreo” y “hartazgo” presentes en todas las federaciones. En los altos mandos admiten que este escándalo causa más daño que muchos episodios anteriores relacionados con corrupción, pues ataca directamente al corazón simbólico del partido: el feminismo y la defensa de los derechos femeninos.

La clave política no reside únicamente en los hechos denunciados, aún bajo diferentes grados de investigación interna o judicial; también está en cómo se ha manejado la crisis. Se critica a la dirección haber tardado cinco meses en ponerse en contacto con las víctimas del caso Salazar, reaccionando solo cuando ellas decidieron acudir a los medios. Dirigentes territoriales no dudan en hablar abiertamente sobre “falta de empatía”, “despropósito” y “malas explicaciones”.

En este contexto, la rueda de prensa ofrecida por Rebeca Torró, nueva secretaria de Organización y sucesora de José Luis Ábalos y Santos Cerdán, ha pasado a ser recordada internamente como un ejemplo claro de una dirección bunkerizada y defensiva. Torró pidió disculpas, prometió revisar el protocolo antiacoso y aseguró que el partido no había encubierto a nadie. Sin embargo, su afirmación sobre no haber podido localizar a Salazar durante meses ha sido recibida con incredulidad por amplios sectores del partido.

El problema va más allá de un mero “fallo protocolario”. En un partido que ha hecho del feminismo su bandera, permitir que personas con denuncias por acoso mantuvieran poder orgánico y representación pública durante meses socava implacablemente la autoridad moral de Sánchez. Como reconocen algunos dirigentes socialistas, “los temas relacionados con feminismo son los que más nos penalizan”.

Corrupción dentro de los ministerios: la UCO cruza el Rubicón

Mientras se intenta apagar el fuego del acoso sexual, otro frente –el relacionado con la corrupción– ha dejado atrás su carácter periférico. La Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil ya no se limita a investigar empresas públicas o segundas líneas: ha entrado en la SEPI, Correos y distintas direcciones generales pertenecientes a los ministerios de Hacienda y Transición Ecológica para recabar información sobre expedientes relacionados con contratación pública.

Este salto cualitativo representa un verdadero punto sin retorno. Hasta ahora, el relato oficial había logrado limitar las tramas a figuras como Koldo García, ex asesor del Ministerio de Transportes; o maniobras dentro empresas públicas relacionadas con contratos opacos: Transportes, mascarillas o gestiones oscuras en la SEPI. Hoy las investigaciones afectan directamente:

• A los centros donde se decide el gasto público, donde se aprueban grandes contratos y licitaciones.
• A entornos políticos vinculados a María Jesús Montero, vicepresidenta y ministra de Hacienda; su cartera ve cómo la UCO entra en direcciones generales bajo su mando.
• A figuras cercanas a Sánchez, como es el caso de Juan Manuel Serrano, antiguo jefe gabinete del presidente en el PSOE y luego presidente de Correos; sus contratos están bajo sospecha judicial.

El caso Serrano es especialmente significativo: la UCO solicita información a Correos sobre contratos firmados durante su gestión, incluyendo un acuerdo ruinoso con un grupo aéreo y operaciones ligadas a la trama relacionada con Koldo. Esto vuelve a colocar bajo el foco mediático al círculo cercano al presidente que le ayudó a conquistar Ferraz pero que hoy aparece manchado por escándalos relacionados con corrupción o machismo.

En el entorno económico del Estado reina una sensación palpable de pánico contenido. Que agentes entren físicamente en sedes ministeriales o en la SEPI evoca imágenes indeseables para cualquier gobierno. La exigencia ética es máxima donde se deciden miles millones euros provenientes del erario público.

La responsabilidad política del presidente, en escalada diaria

Todo esto tiene consecuencias directas: la responsabilidad política recae cada día más sobre Pedro Sánchez. No solo porque las tramas relacionadas con Transportes, SEPI y Correos demuestran que las presuntas irregularidades ocurrían precisamente donde se toman decisiones clave para lo público; también porque varios implicados pertenecen al círculo más cercano tanto al presidente como a su vicepresidenta económica.

Respecto al tema del acoso sexual, voces influyentes como las de María Chivite, presidenta navarra; o Carlos Martínez, líder regional del PSOE en Castilla y León han reconocido que las reacciones no han sido ni rápidas ni contundentes; exigen disculpas claras hacia las víctimas afectadas. Más lejos aún ha llegado Sara Simón, consejera castellanomanchega encargada de Igualdad; ella señala directamente al secretario general afirmando que debe asumir responsabilidades e indicando su desconfianza respecto a su desconocimiento sobre los comportamientos ocurridos dentro su círculo cercano.

En términos gubernamentales, no solo hay presión interna. La vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, reclama abiertamente una remodelación profunda del Ejecutivo advirtiendo que “no podemos continuar así” ante las investigaciones relacionadas con SEPI junto al goteo continuo casos acosos dentro su principal socio coaligado. Por ahora Moncloa descarta una crisis profunda dentro gobierno limitándose sólo realizar “cambios quirúrgicos”, obligados entre otras cosas por adelantamiento electoral previsto para Aragón donde separarán a Pilar Alegría del Consejo Ministerial para centrarse exclusivamente campaña electoral.

Aún más inquietante es lo que murmuran algunas federaciones socialistas sobre un posible adelanto electoral para intentar “salvar lo salvable” antes horizonte municipal autonómico 2027; esto ocurre antes deterioro interno llegue ser irreversible. A pesar desgaste interno evidente , datos oficiales del CIS continúan mostrando un PSOE liderando frente PP lo cual dificulta aún más atrever alguien verbalizar públicamente ese escenario anticipado electoralmente hablando .

La cocina interna: vendettas, nervios y miedo al efecto dominó

La crisis ha trastocado completamente las dinámicas internas dentro partido. En Ferraz ya surgen movimientos reposicionamiento entre dirigentes quienes aprovechan debilidad dirección ajustar cuentas pasadas preparar futuros relevos . En lenguaje interno emergen conceptos tales como:

• “Vendettas internas” contra actual cúpula .
• “Deslealtades” provenientes cuadros quienes ven llegado momento mover ficha .
• Y especialmente existe especie “sálvese quien pueda” prevaleciendo federaciones temiendo pagar electoralmente decisiones ajenas .

La atmósfera descrita por cargos militantes oscila entre afirmaciones como “estamos hundidos”, hasta comentarios tales como “esto nos machaca todos” o visualizando situación gráfica como «un carrusel». . Además circula idea creciente acerca secretario general ha dejado partido manos círculo muy reducido , centrado exclusivamente gestión gubernamental desconectado totalmente pulso militancia . .

En ámbito institucional nadie descarta aparición nuevos casos acosos : «damos por descontado» continuarán goteo , admiten fuentes socialistas consultadas prensa .. Esta previsión alimenta temor efecto dominó pueda extender ‘Me Too’ socialista otros territorios escalones orgánicos amplificando erosión moral política .

El discurso feminista contra las cuerdas y un relato que ya no cuadra

Quizá uno factores más devastadores proyecto Sánchez es incompatibilidad entre relato realidad . Durante años PSOE exhibido narrativa «tolerancia cero» machismo convirtiendo feminismo eje acción política . Hoy debe justificar motivos detrás :

• Casos graves presunto acoso gestionados meramente problemas reglamentarios.
• Víctimas internas requerían acudir prensa Fiscalía sentirse escuchadas.
• Respuesta política resultó lenta defensiva escasamente empática muchas dirigentes.

La propia dirección reconoce voz baja falta «empatía especial» infravalorando capacidad destructiva tipo escándalos dentro partido define estatutos feminista. Combinación machismo interno corrupción externa erosiona simultáneamente columnas edificio : moral gestión .

Mientras tanto relato oficial intenta refugiarse idea «problema estructural sociedad», presente todos partidos . . Sin embargo argumento tropieza dato propios socialistas repiten privado : quien presume exige más. Hoy listón PSOE más alto…y también incumplido .

Curiosidades, datos y guiños de una crisis sin precedentes

Algunos detalles ilustran hasta qué punto esta crisis singular historia reciente socialismo español :

• Conversaciones off the record dirigentes describen estado ánimo partido metáforas cinematográficas : desde «Titanic» campamento base antes avalancha . .
• Imagen Pilar Bernabé secretaria Igualdad abrazada consolada compañeras sede Ferraz tras dar explicaciones prensa símbolo desgarrador interno . .
• Único barón puesto mesa forma pública necesidad adelanto electoral Emiliano García-Page viejo antagonista Sánchez , visto Madrid ahora «aguafiestas siempre adelanta medio año otros piensan privado». .
• Plena tormenta CIS sitúa PSOE nueve puntos arriba PP , dato comentado pasillos mezcla escepticismo ironía resignación . .
• Militantes cuadros circula frase resume desconcierto : «pensábamos problema era derecha , al final agujero estaba bajo nuestros pies».

En política hemeroteca nunca perdona ; pero esta crisis PSOE problema radica ya no lo dicho ayer sino lo observado hoy directo. Y esa película , hasta ahora , tiene pinta comedia romántica precisamente.