Carlos Dávila: «¿Qué va a quedar de España?»

El titular de Carlos Dávila estremece: «¿Qué va a quedar de España?»

El veterano periodista y analista político, lanza una dura advertencia sobre el estado actual de España en su última columna publicada en OKDiario el 13 de febrero de 2025.

Con un tono de urgencia y preocupación, Dávila plantea que la pregunta correcta ya no es qué quedará de España, sino qué queda hoy del país.

El autor comienza su análisis haciendo referencia al libro premonitorio de Federico Jiménez Losantos, «Lo que queda de España», publicado hace cuatro décadas.

Dávila argumenta que la situación actual ha superado con creces las denuncias y previsiones de aquel entonces:

«Realmente, si hoy escribiera la enésima edición se encontraría con que las denuncias pasadas se han quedado pálidas ante las realidades de ahora.»

Para ilustrar su punto, el periodista presenta tres ejemplos recientes que considera alarmantes:

1. El presidente del Tribunal Constitucional dispuesto a «asesinar» la Constitución.
2. El fiscal general del Estado, un «presunto delincuente a un ápice de convertirse en delincuente en toda regla».
3. El presidente del Gobierno y su familia «atrapados por aberrantes casos de corrupción».

Dávila lamenta la aparente indiferencia de la sociedad civil y la ineficacia de la oposición política frente a estos hechos. El periodista señala:

«Pues eso: ya está a punto de no quedar nada de España entre el bostezo general y culpable de la sociedad civil y la escasa eficacia de la oposición política.»

Uno de los puntos más preocupantes para el autor es la reciente retirada de los Cuerpos Estatales de Seguridad de los puertos y aeropuertos vascos y catalanes. Dávila considera este hecho como un «episodio nuclear» en el proceso de desmembramiento del país:

«Pues sucede que este es el penúltimo privilegio que un desalmado ha cedido a sus socios de ocasión, las fronteras del país, los límites que configuran, como ningunos otros, un estado independiente.»

El periodista critica duramente la actitud pasiva de la población ante estos acontecimientos, comparándola con la preocupación por asuntos triviales como los atascos de tráfico o la dificultad para encontrar mesa en un restaurante.

Dávila recurre a una cita atribuida a Bismarck para subrayar su argumento:

«Hay que ver cómo sestean los españoles viendo con extremada pereza, cómo unos furiosos iconoclastas se cargan el país más antiguo de Europa».

El autor concluye su columna con una reflexión sobre la falta de reacción de la sociedad española ante lo que considera una destrucción sistemática del país. Dávila sugiere que, aunque hay cierto descontento, no existe una verdadera preocupación o acción para detener el proceso de desintegración que él percibe.

El autor:

Carlos Dávila Pérez de Camino nació en Madrid el 13 de mayo de 1948. Con 76 años, es un reconocido periodista español con una extensa carrera en prensa escrita, radio y televisión. Ha trabajado en medios como ABC, Diario 16 y Radio Nacional de España. Fue director de publicaciones del grupo Intereconomía y fundador del diario La Gaceta. Dávila también ha sido profesor en cursos de verano de El Escorial y de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo de Santander. Casado y padre de familia, Dávila es conocido por su estilo directo y sus análisis críticos sobre la política nacional española.