“Cuando los mayas diseñaron el calendario con 5126 años me imagino que no pensaron que llegaríamos tan lejos”

Pesadillas en las que unos sacerdotes mayas perpetran mortales ceremonias es el arranque de la novela de Alberto Granados, Los vigilantes de los días (Ed. Espasa). Un periodista de la CNN es destinado a México para preparar una serie de reportajes a propósito de la visita en 2012 del presidente de EEUU a aquel país donde comprobará aterrado cómo esos sueños se materializan frente a sus ojos.

Oscuros negocios de los narcos mexicanos, la complicidad de empresarios de todo el mundo que buscan sangrientas emociones y el drama de Ciudad Juárez son los ingredientes para poner negro sobre blanco todo lo que se mueve en el país centroamericano en torno a la predicción maya de diciembre de 2012.

Alberto Granados, que además dirige el programa Hoy por Hoy Madrid en Cadena Ser, cuenta en esta entrevista en Periodista Digital que Richard, el periodista de la CNN, acude una noche a las ruinas mayas y «ve lo que no tenía que ver». A partir de ese momento entra en un juego con un narcotraficante muy poderoso de México que «le hace la vida realmente difícil».

LA PROFECÍA MAYA

Granados aprovecha esta novela para documentar y explicar todo lo relacionado con las especualciones entorno a diciembre de 2012. No en vano el título de su libro, Los vigilantes de los días, hace referencia a los sacerdotes mayas encargados de hacer el seguimiento del calendario y anotaban todas las predicciones. El calendario maya encadena, explica Granados, un ciclo con el siguente.

«La cuenta más larga hecha por los mayas abarca 5126 años que termina precisamente en diciembre de 2012. Pero esto no significa necesariamente que se acabe el mundo porque según explican en sus calendarios cuando termina un ciclo empieza otro. Lo que me imagino es que pensaban que no fueramos a llegar tan lejos en el tiempo.

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Ten en cuenta que su primer calendario era de 52 años. Bastante para ellos que tenían una vida media de 30 años.»

En los jeroglíficos asociados a estos calendarios se muestra, por ejemplo, la llegada del hombre blanco, de los conquistadores.

«Y lo que también es cierto es que en ningún momento se predice que vaya a ver un cataclismo en 2012, sólo un cambio de ciclo. Lo que pasa es que el ser humano tiene miedo cuando se anuncian cambios. Recuerda el «Efecto 2000″ y no pasó nada.»