Sergio Ramos: futbolista y torero

El defensa central y capitán del Real Madrid y de la Selección española es un arrebatado aficionado a los toros y en una ocasión, jugándose la vida, toreó un morlaco de casi 500 kilos.

Sergio Ramos se ha convertido en la imagen más llena de bravura y pasión cuando hablamos de futbolistas que sean icono en el Real Madrid.

Sus goles en los tiempos de descuento ya son leyenda viva del madridismo, y nadie mejor que él encarna ese espíritu de superación y de nunca darse por vencido.

Todo esto, amén de su enorme calidad, que le ha permitido permanecer durante más de una década vistiendo la camiseta blanca. Sin ella, nadie aguanta tanto tiempo.

Sin embargo, la gran historia de Ramos en el Real Madrid pudo cambiar drásticamente casi al principio de su periplo en el conjunto blanco.

Así lo reconoció el propio futbolista en una entrevista concedida a José Ramón de la Morena en El Transistor de Onda Cero.

Y es que, cuando todavía era un chaval, el de Camas hizo algo que bien podría haberle costado su expulsión inmediata del club o una caída en desgracia importante.

Ramos toreó un Morlaco de cientos de kilos de peso, ya que siempre ha dejado entrever que el mundo de los toros es otra de sus grandes pasiones junto con el fútbol.

De ese episodio puede dar fe el que es uno de sus grandes amigos dentro de esta disciplina, el torero Alejandro Talavante:

«Me impresionó su serenidad y valor, estuvo genial».

Y seguramente sea cierto… como también lo es que el madridista se jugó la vida, tal y como cuentan los compañeros de Diario Gol.

El propio Sergio reconoce ahora que lo que hizo fue una locura:

«Eso fue una vez hace muchos años, creo que tenía 20, en los primeros años en el Madrid… Fue un calentón, una locura, algo totalmente inconsciente […] Tengo un vídeo, pero está en casa bajo candado. Cuando ves venir al toro te acojonas, pero me pudieron las ganas».

Desde luego que le pudieron, porque los futbolistas tienen prohibido hacer este tipo de cosas por contrato. Lo dicho… el vídeo prohibido de Sergio que nunca verá la luz, y que pudo ser su tumba en el Real Madrid.