Seis incendios forestales continúan fuera de control

Los Ángeles: Bomberos luchan contra el reloj mientras las llamas amenazan zonas exclusivas de la ciudad

Al menos 11 víctimas mortales, más de 150.000 personas evacuadas y miles de casas reducidas a cenizas

El incendio de Los Angeles
El incendio de Los Angeles. PD

El balance provisional es desolador: al menos 11 víctimas mortales, más de 150.000 personas evacuadas y miles de estructuras reducidas a cenizas.

Los bomberos libran una batalla titánica contra las llamas, que ya han arrasado más de 37.000 acres (cerca de 15.000 hectáreas) en el condado de Los Ángeles.

El incendio de Palisades, el más extenso y destructivo, ha tomado un giro alarmante en las últimas horas.

Las llamas, alimentadas por los fuertes vientos de Santa Ana, han cambiado de dirección y avanzan ahora hacia el este, poniendo en jaque al lujoso barrio de Brentwood.

Las autoridades han emitido órdenes de evacuación obligatoria para amplias zonas de Brentwood, incluyendo áreas al norte del bulevar Sunset hasta el embalse de Encino, y desde la autopista 405 hacia el oeste hasta el cañón de Mandeville.

Entre los residentes de esta zona se encuentran celebridades como Arnold Schwarzenegger, el CEO de Disney Bob Iger, y la estrella de la NBA LeBron James.

Sin embargo, como señala Ingrid, una residente desplazada por el fuego, «no todos los que viven en estas comunidades son famosos o súper ricos. Hay personas que viven de manera bastante humilde, que han trabajado durante años, tienen una pensión y algunas inversiones. Lo han perdido todo».

Una lucha contra el reloj

Los bomberos trabajan sin descanso para contener el avance de las llamas. Equipos aéreos rocían las colinas en llamas con agua y retardante de fuego en un intento desesperado por frenar la propagación del incendio de Palisades.

Sin embargo, los pronósticos meteorológicos no son alentadores. Se espera que los vientos se intensifiquen durante la noche, lo que podría exacerbar aún más la situación. Los equipos de emergencia se preparan para una noche crucial en su lucha contra el fuego.

Críticas a la infraestructura

La frustración crece entre los residentes y los equipos de emergencia ante el fallo de los hidrantes en algunas zonas afectadas.

Esta deficiencia en la infraestructura ha dificultado enormemente la labor de los bomberos, que se han visto obligados a buscar fuentes alternativas de agua para combatir las llamas.

Las autoridades califican estos incendios como «uno de los desastres naturales más destructivos en la historia de Los Ángeles».

Los dos incendios más grandes, Palisades y Eaton, se han convertido en los más devastadores en la historia del condado de Los Ángeles, según Cal Fire.

El presidente Joe Biden ha anunciado que el gobierno federal cubrirá íntegramente el coste de la recuperación durante los próximos 180 días, una medida que refleja la magnitud de la catástrofe.

Evacuaciones masivas y centros de acogida

Más de 180.000 personas han sido evacuadas de sus hogares. Los centros de acogida, como el Centro Recreativo de Westwood, se han convertido en refugios improvisados para los desplazados.

Estos espacios acogen a personas de diversas comunidades y estratos socioeconómicos, todas unidas por la tragedia común de haber perdido sus hogares.

En medio del caos, las redes sociales se han inundado de bulos y desinformación.

Imágenes falsas del icónico cartel de Hollywood en llamas han circulado ampliamente, generando confusión y pánico innecesario.

Las autoridades y los medios de comunicación trabajan arduamente para desmentir estas informaciones falsas y proporcionar datos precisos a la población.

Aunque los bomberos han logrado algunos avances, conteniendo el 11% del incendio de Palisades y el 15% del incendio de Eaton, la batalla está lejos de terminar.

Los próximos días serán cruciales para determinar si se logra controlar la situación o si los incendios continúan expandiéndose.

Los expertos advierten que el cambio climático está exacerbando la frecuencia y la intensidad de estos eventos extremos. California, y en particular el sur del estado, se enfrenta a un futuro donde los incendios forestales podrían convertirse en una amenaza cada vez más común y devastadora.

Solidaridad en medio de la tragedia

A pesar de la destrucción y el caos, la comunidad de Los Ángeles ha mostrado una notable resiliencia y solidaridad.

Voluntarios de toda la región se han movilizado para ayudar a los evacuados, ofrecer refugio a mascotas y apoyar a los equipos de emergencia.

Los próximos días y semanas serán un desafío monumental para Los Ángeles.

La ciudad deberá no solo apagar las llamas, sino también reconstruir comunidades enteras y ayudar a miles de personas a recuperar sus vidas. El incendio de Palisades y sus devastadoras consecuencias serán, sin duda, un punto de inflexión en la historia de esta metrópolis californiana.

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