María Corina Machado: “Los días del chavismo en el poder están contados y no son muchos»

La batalla por el futuro de Venezuela ha alcanzado un punto de inflexión.

Las palabras de la líder opositora María Corina Machado, cargadas de convicción y determinación, reflejan no solo el desgaste del chavismo en el poder, sino también el creciente empoderamiento de una oposición que, a pesar de los golpes, sigue firme en su lucha.

La afirmación de que “los días del chavismo están contados y no son muchos” va más allá de una declaración política; es un grito de esperanza para millones de venezolanos que anhelan un cambio.

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El cuestionado tercer mandato de Nicolás Maduro, producto de unas elecciones cuya transparencia ha sido severamente criticada, marca una nueva etapa de aislamiento para el régimen.

La comunidad internacional, incluidas figuras de la izquierda democrática mundial, ha tomado distancia, dejando al chavismo sin el apoyo externo que alguna vez fue un pilar clave de su supervivencia. Esto no es casualidad: los argumentos presentados por la oposición sobre las irregularidades en los comicios son sólidos y difíciles de ignorar.

Machado no se limita a denunciar; también deja claro que la lucha por la democracia es una pelea cuerpo a cuerpo. Aludiendo a la analogía del ring, su mensaje es contundente: la oposición está dispuesta a recibir y devolver golpes, perseverando hasta lograr la victoria. Estas palabras, pronunciadas en un contexto donde el miedo y la intimidación son herramientas recurrentes del oficialismo, son un recordatorio de que el cambio no se logra sin sacrificios.

El Consejo Nacional Electoral, controlado por el chavismo, ha incumplido con la publicación detallada de los resultados, un hecho que socava aún más la confianza en el sistema electoral. Por su parte, la oposición asegura poseer actas que respaldan la victoria de su candidato, Edmundo González Urrutia.

Aunque el oficialismo descalifica estos documentos, el simple hecho de que exista tal disputa ilustra la fractura del sistema político venezolano y el creciente rechazo hacia un gobierno que, como señala Machado, está “contra las cuerdas”.

El chavismo, al parecer, se encuentra atrapado en una encrucijada. Sin aliados internacionales fuertes y con un creciente descontento interno, su estrategia parece centrarse en la confusión y el miedo.

Sin embargo, el discurso de Machado apunta a una oposición unificada y decidida, que entiende los riesgos pero también las oportunidades de este momento histórico.

Venezuela está en un momento crítico. Los ciudadanos, tanto dentro como fuera del país, observan con atención cómo se desarrolla esta lucha por la democracia. La determinación de la oposición, encarnada en figuras como María Corina Machado, ofrece un rayo de esperanza en medio de la incertidumbre.

El camino hacia el cambio no será fácil ni rápido, pero es inevitable. Como bien dice Machado, “ganaremos”, y para muchos, esa promesa es suficiente para seguir adelante.