El ‘progre’ diario Le Monde retrata a Pedro Sánchez: bloqueo, debilidad y escándalos a granel

Le dan hasta en el velo del paladar.

çY ya no sólo los medios conservadores de Gran Bretaña o algún analista liberal norteamericano.

Sacuden al marido de Begoña hasta los periódicos progres, que han estado siete años pasándole la mano por el lomo.

Los mismos que decían papanatas que era muy ‘guapo‘.

En el convulso verano político español, Pedro Sánchez se sigue llevando tandas de azotes en la prensa internacional.

Si las críticas de la oposición o los editoriales nacionales ya eran moneda corriente, ahora es Le Monde, uno de los diarios izquierdistas más influyentes del Viejo Continente, quien lanza un análisis demoledor sobre la situación del Gobierno Frankenstein.

La crónica francesa, firmada por Sandrine Morel, su corresponsal en Madrid, retrata un Ejecutivo “débil y aislado”, atrapado entre el bloqueo parlamentario y los escándalos de corrupción que han hecho temblar los cimientos del PSOE.

La noticia no ha tardado en viralizarse en redes y tertulias: ¿qué ha llevado a que el tradicional aliado ideológico europeo cuestione con tanta dureza a Sánchez? ¿Es solo una anécdota o refleja una deriva preocupante en la política española?

Un Gobierno sin presupuestos ni reformas

El análisis de Le Monde arranca con una observación tan sencilla como devastadora: “A falta de una mayoría estable, el Gobierno del presidente socialista no ha presentado un solo proyecto de ley de presupuestos desde 2023 y debe posponer sus principales proyectos de reforma en un clima cada vez más tenso, en medio de escándalos de corrupción”.

Esta frase resume meses de parálisis institucional, donde el Ejecutivo ha visto cómo sus iniciativas estrella —reformas fiscales, laborales o energéticas— naufragaban en el Congreso por falta de apoyos.

La gota que colmó el vaso fue el reciente fracaso del decreto-ley para reforzar el sistema eléctrico. T

ras el histórico apagón que dejó sin luz a media España durante casi diez horas, la respuesta gubernamental fue rechazada con contundencia: 183 votos en contra frente a 165 a favor.

La incapacidad para articular mayorías estables no es solo un problema aritmético; es un síntoma evidente del desgaste interno y externo del bloque progresista.

Entre los datos objetivos que subraya la prensa gala figuran:

• Cero proyectos de ley de Presupuestos presentados desde 2023.
• Principales planes de reforma pospuestos o aplazados sine die.
• Clima político cada vez más crispado, con enfrentamientos incluso entre socios tradicionales.

Escándalos que salpican al núcleo duro

Si algo ha puesto sal y pimienta al análisis internacional es la sucesión de escándalos que rodean al entorno más cercano del presidente. El caso más sonado es el del ex número tres del PSOE, Santos Cerdán, investigado por presuntos sobornos a cambio de contratos públicos. Las imágenes del registro policial en la sede socialista conmocionaron incluso a las bases más fieles del partido.

El propio Sánchez se vio obligado a pedir perdón públicamente: “Quiero pedir perdón a la ciudadanía. Especialmente a los militantes y simpatizantes del PSOE”. Sin embargo, descartó dimitir o convocar elecciones anticipadas, lo que aumentó aún más la presión sobre su liderazgo.

El panorama judicial incluye:

• Investigaciones abiertas contra Santos Cerdán y José Luis Ábalos, ambos figuras clave del sanchismo.
• Informes policiales que detallan supuestos amaños y comisiones ilegales.
• Dimisiones forzadas dentro del núcleo duro socialista.

El aislamiento internacional y la presión interna

No solo la aritmética parlamentaria complica la vida al presidente. Según Le Monde y otros medios internacionales, Sánchez intenta “recuperar el control en un contexto de críticas internas y presión internacional”. El enfrentamiento reciente con Donald Trump —que llegó a calificar a España como “un problema”— tampoco ha ayudado a recomponer puentes ni dentro ni fuera del bloque progresista.

La prensa internacional coincide en subrayar:

• La dificultad para mantener cohesionada una coalición frágil, especialmente ante socios reticentes como Sumar o partidos nacionalistas.
• La creciente tensión ante un posible adelanto electoral: mientras algunos piden paciencia, otros ven inevitable una convocatoria anticipada si continúan los reveses parlamentarios.
• La imagen exterior deteriorada por los casos de corrupción y por una agenda internacional marcada más por crisis internas que por logros diplomáticos.

¿Qué puede pasar ahora? Escenarios abiertos y curiosidades

El futuro inmediato se presenta incierto. A medio mandato, Sánchez afronta desafíos considerables:

• Sin Presupuestos ni grandes reformas aprobadas desde hace año y medio.
• Mayoría parlamentaria cada vez menos fiable, con socios exigentes e imprevisibles.
• Oposición crecida, que exige dimisión pero descarta por ahora moción de censura.
• Presión mediática internacional, inusual para un presidente español desde hace décadas.

La anécdota curiosa: pese a su línea editorial progresista, Le Monde ha sido más duro con Sánchez esta semana que muchos medios conservadores españoles. Y no es para menos: hasta los aliados ideológicos pierden la paciencia cuando las promesas electorales se diluyen entre dimisiones forzadas y reformas aplazadas.

Para quienes siguen pensando que “lo que pasa en Madrid se queda en Madrid”, basta leer titulares galos para comprobar que los problemas nacionales ya no entienden de fronteras. En Francia lo resumen así: “Pedro Sánchez bloqueado a mitad de mandato”. Y aunque nadie le desee mal fario al presidente español, lo cierto es que ni siquiera París le está sacando ya las castañas del fuego.