Enrique Santiago o cuando el narcotráfico no es un crimen sino una forma de financiación de la lucha política

En descargo del sectario Enrique Santiago sólo se puede decir que su jefe inmediato, el ‘aparatchik‘ elegido para liderar el equipo de la reconstrucción económica y social de España tras el coronavirus se llama Patxi López.

El currículum académico y profesional del socialista López, puede resumirse en una sola línea: terminó de milagro el bachillerato y se matriculó en la carrera de ingeniería Industrial, pero no llegó a aprobar ni el primer curso.

A eso hay que añadir, que nunca ha trabajado en nada y que desde los 16 años, cuando ingresó en las Juventudes Socialistas del País Vasco, ha vivido de la política.

Más o menos lo mismo que su segundo, el comunista Enrique Santiago, con la diferencia de que este último al menos es licenciado en Derecho por la Universidad Complutense de Madrid y ha trabajado alguna vez como abogado.

Para la hemeroteca y vergüenza de todos, subrayar que el logro profesional más relevante de Santiago, siendo representante de la guerrilla de las FARC en las conversaciones de La Habana que llevaron a la firma del acuerdo de paz del Gobierno de Juan Manuel Santos con la narcoguerrilla, fue lograr que se aceptara que el narcotráfico no es un crimen sino una forma de financiación de la lucha política.

Como subraya el diario ABC, en su edición de este 8 de mayo de 2020:

«Santiago […] con gran eficacia consiguió que el narcotráfico realizado por las FARC no fuera considerado un crimen sino una forma de financiación de una lucha política».

Sobre este asunto, el online colombiano NoDo, tras afirmar que Santiago «legitimó la economía narcotraficante de las FARC’, llegó a publicar en abril de 2018:

«El rol de Enrique Santiago, que hasta la fecha permanecía en una especie de limbo mediático, se ha hecho con el paso de los meses más importante, convirtiéndose en una figura que atenta fundamentalmente contra la constitución política de Colombia, y puente de articulación del terrorismo colombiano con las células del crimen internacional, que cada año que pasa ahorcan más a las naciones de Europa. En este contexto, Enrique Santiago debe ser apresado de venir a Colombia, lo que configuraría un paso en la dirección correcta para que Latinoamérica erradique los satélites diplomáticos de las FARC en el extranjero».

La Comisión para la Reconstrucción Social y Económica tras la pandemia del Covid-19 comenzó este 7 de mayo de 2010 su andadura con una sesión constitutiva en la que los cinco miembros de la mesa fueron escogidos con poco consenso.

PSOE y Unidas Podemos se aseguraron tres de esos puestos, con Patxi López como presidente.

Enrique Santiago, secretario general del PCE, será el vicepresidente primero.

El personaje se las trae. Enrique Santiago, por ejemplo, considera que la pandemia, que se ha cobrado oficialmente en España más de 26.000 vidas hasta la fecha y que está dejando millones de parados, da «respiro a la naturaleza».

Así lo expresó el pasado 24 de marzo en un mensaje en su cuenta oficial de Twitter.

• «A nivel económico, el Covid-19 no está respaldando una desenfrenada fluctuación sino un todopoderoso derrumbe en el corazón de la forma de consumismo que domina en los países más opulentos. Que da un respiro a 40 años de maltrato a la naturaleza».
• «Las únicas medidas que van a funcionar tendrán que enfrentarse al modelo neoliberal que venía estando vigente. Toca cuestionar el consumismo abusivo y el modelo productivo. Y toca poner los cuidados en el centro de la vida política y social».

En los últimos días, Enrique Santiago se ha hecho eco, por ejemplo, de las palabras de la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, también de Unidas Podemos, alardeando de pagar 5,2 millones de prestaciones por desempleo.

El que fuera asesor jurídico de los grupos terroristas colombianos FARC integró el equipo negociador de Unidas Podemos para la investidura del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.

El pasado septiembre, Santiago participó en una charla organizada por la revista Mongolia y ensalzó abiertamente las figuras de Lenin, Nicolás Maduro, Santiago Carrillo y Fidel Castro.

Por ejemplo, al primero se refirió de este modo:

«Absolutamente le reivindico, de la nada construyó un estado alternativo donde había un país feudal».

CARTA AL DIRECTOR

Estimada/o amigo/:

En la edición de “Periodista Digital” del día 8 de mayo de 2020, se publicó el artículo periodístico contenido en el link:

https://www.periodistadigital.com/politica/partidos-politicos/20200508/enrique-santiago-narcotrafico-crimen-forma-financiacion-lucha-politica-noticia-689404304884/

en el que por dos veces se me atribuye falsa o erróneamente, pero expresamente, una frase que nunca he pronunciado o escrito, concretamente en el titular de la noticia y a continuación a lo largo del texto publicado. Me refiero a la siguiente frase:

“Enrique Santiago: «El narcotráfico no es un crimen sino una forma de financiación de la lucha política»”

Se trata de una afirmación rotundamente falsa, por lo que incluso en su publicación ustedes prescinden de citar la presunta fuente donde hubieran consulado u obtenido la presunta cita.

Es decir, se trata de una información inexacta y entiendo que su divulgación únicamente pretende causarme perjuicio personal, tratándose por tanto del supuesto previsto en el artículo 1 de la Ley Orgánica 2/1984, de 26 de marzo, reguladora del derecho de rectificación.

Por dicho motivo, conforme a lo establecido en el artículo 2 de la citada Ley, le ruego proceda a publicar en su medio la presente rectificación a la mayor brevedad, debiendo reproducir y difundir íntegramente la rectificación, dentro de los tres días siguientes al de la recepción de la presente, dándole en su medio una relevancia semejante a aquélla en que se publicó o difundió la información que le pido rectificar, sin comentarios ni apostillas.

Rectificación:

“Este medio no tiene constancia alguna de que la frase «El narcotráfico no es un crimen sino una forma de financiación de la lucha política» haya sido pronunciada o escrita por Don Enrique Santiago Romero, por lo que no es correcto haberla atribuido al anterior como erróneamente hicimos en nuestra edición del pasado día 8 de mayo de 2020. “

Con la publicación de esta rectificación entenderé que ha quedado salvaguardado mi derecho fundamental al honor, a mi intimidad personal y de mi familia y a mi propia imagen, garantizado en el artículo 18 de la Constitución, siendo de esta forma innecesario reclamar ninguna tutela judicial.

Atentamente

Enrique Santiago Romero