Uvas de Nochevieja y resto de alimentos que provocan atragantamientos mortales

A la hora de dar alimentos a los más pequeños, debemos tener en cuenta siempre las proporciones y dimensiones del bocado a ingerir, para evitar atragantamientos letales. Cada año, la crónica negra de la prensa suele llevar algún triste titular al respecto.

Todos sabemos que las uvas son peligrosas para los más pequeños, y para los mayores también, pero hay más alimentos que pueden resultar peligrosos:

Semillas
Suelen atascarse con gran facilidad y provocar atragantamientos. Fundamentalmente porque se comen muy rápido.

Uvas
Las grandes y tristemente conocidas cada fin de año; para evitar atragantarse se pueden partir.

Zanahorias crudas
Están entre los 10 alimentos que más lesiones han provocado en niños menores de 3años, según los estudios.

Manzanas
Si no se corta en pedazos pequeños suelen ser muy peligrosas.

Palomitas de maíz
Es fácil, si no se mastican bien, que se atasquen en la garganta.

Chicles
Son moldeables y ajustables a la garganta, por los que pueden producir un tapón letal.

Aceitunas con hueso
Son muy traicioneras, sobre todo, si no esperas encontrarte un hueso.

Jamón serrano
La grasa del jamón se atasca con gran facilidad, por lo que es mejor quitarla antes de comerlo.

Galletas rústicas
Son tan secas que te dejan sin saliva, con lo que es muy sencillo atragantarse.

Cerezas
Al igual que pasa con las aceitunas, los huesos son traicioneros.

Pistachos
Otros fruto seco peligroso, sobre todo para los más pequeños.

Almendras y avellanas
Sucede lo mismo que con los pistachos.

Espina de pescado
Es mejor quitarles las espinas antes de comerlos.