Más información
La sangre, de momento, no llega al río de Bernesga en el pueblo de Villamanín (León), aunque se ha mascado la tragedia.
Después de casi cuatro horas de debate en la segunda planta del Hogar del Pensionista, el centenar de vecinos reunidos en un espacio de 40 metros cuadrados ha llegado a un acuerdo para cuadrar las cuentas y conseguir los cuatro millones de euros que faltaban para entregar el Gordo de Navidad a todos los que compraron el número ganador.
La alegría desbordante por el Gordo de la Lotería de Navidad se tornó en preocupación en Villamanín, un pequeño pueblo con apenas 300 habitantes situado en la Montaña Central Leonesa.
El número 79.432, que fue vendido en participaciones de cinco euros por la comisión de fiestas, prometía un premio teórico de 80.000 euros brutos por papeleta. Sin embargo, un error administrativo dejó un desfase de cuatro millones: se vendieron 50 papeletas de más debido a que no se presentó un talonario en la administración de La Pola de Gordón.
La comisión adquirió 81 décimos por un total de 1.620 euros en dicha administración, procedentes de La Bañeza. Cada participación otorgaba cuatro euros del premio y uno adicional como donativo para las festividades locales
El problema surgió al realizar el conteo: faltaban décimos para cubrir esas 50 papeletas adicionales, lo que significaba que había cuatro millones de euros del premio total de 35,6 millones sin respaldo. En una reunión urgente, convocaron a todos los poseedores de las papeletas el viernes por la tarde en el Hogar del Pensionista para explicar lo sucedido y llevar a cabo un recuento.
El acuerdo que salvó la Navidad
Después de cuatro horas acaloradas en un espacio reducido, donde se congregaron alrededor de un centenar de vecinos, se llegó a un acuerdo. La comisión de fiestas decidió ceder su propio premio y décimo, valorados en dos millones de euros. Los otros dos millones provendrían de recortes en los premios destinados a los vecinos. La votación mostró una abrumadora mayoría: 250 a favor y solo dos en contra, siendo estos últimos quienes amenazan con tomar acciones legales.
- Propuesta inicial: Aplicar una reducción del 6% por cada papeleta, lo que implica una disminución aproximada entre 4.800 y 5.000 euros respecto a los 80.000 brutos (neto alrededor de 65.000).
- Resultado: La comisión asumirá la mitad del desfase utilizando su propio premio, mientras que los vecinos aportarán el resto proporcionalmente.
- Pendiente: Aún no se ha determinado el monto exacto por papeleta, ya que dependerá del número total que decida cobrar ahora.
Desde la comisión, se subraya que jamás ha existido fraude o trampa, sino simplemente un error en el conteo. Olvidaron presentar un talonario con esas 50 papeletas y no lo advirtieron hasta después del sorteo. Algunos vecinos murmuran sobre tensiones internas, incluyendo rumores sobre un miembro que ya cobró su parte.
Voces del pueblo y el alcalde
El alcalde de Villamanín, Félix Álvaro Barreales Canseco, muestra optimismo ante la situación. Afirma que el Ayuntamiento falló al no supervisar adecuadamente como solía hacerse anteriormente y espera que los agraciados puedan cobrar al menos algo, aunque luego puedan reclamarlo. Un vecino resume la situación diciendo: «Parece ser que han vendido más papeletas de las debidas y venimos a ver qué pasa» . Otro añade: «Tengo una papeleta y vengo a ver qué pasa» .
Las reacciones son variadas:
- Algunos son comprensivos: Un error lo comete cualquiera; tienen que actuar con humildad .
- Otros están indignados: No están dispuestos a ceder nada, ya que consideran que es culpa exclusiva de la comisión, no suya. Hablan incluso sobre la falta de constitución legal del colectivo.
- Hay temor a multas: Vender más papeletas podría considerarse reventa ilegal según la Instrucción General de Loterías, lo cual podría acarrear sanciones al Ayuntamiento.
El Gordo ha repartido alegría en León con un total impresionante de 728 millones, dejando afortunados como La Bañeza, Villablino y este mismo pueblo entre los beneficiados. Aquí, sin embargo, lo que comenzó como una celebración terminó generando una crisis; aun así, el acuerdo alcanzado evita demandas por el momento.
Perfil de la comisión y curiosidades
La comisión de fiestas es responsable de organizar eventos patronales en este pueblo minero con rica historia obrera. Se financia mediante rifas y loterías como esta, una tradición local destinada a sufragar las verbenas y festividades. Su falta de formalización complica aún más su situación legalmente.
Algunas anécdotas interesantes:
- El talonario olvidado fue clave en todo este embrollo; uno de sus miembros lo dejó olvidado en casa.
- Aproximadamente se vendieron unas 450 papeletas entre sus habitantes; casi todos participaron.
- A pesar del error cometido, han logrado recaudar un donativo extra generoso para las fiestas: unos 20.000 euros adicionales.
- La reunión fue tensa; asistieron aproximadamente 300 personas a un espacio diseñado para solo 40 m², lo cual llevó a un debate maratoniano durante cuatro horas.
- El pueblo ha demostrado unidad al pasar del descontento inicial hacia un pacto mayoritario, quedando apenas dos disidentes.
Posibles consecuencias legales y económicas
Los dos miembros disidentes están decididos a llevar el asunto ante los tribunales si no les satisfacen los resultados obtenidos. La comisión busca llegar a un acuerdo justo, transparente y legal pensando siempre en el bien común. Hacienda también estará involucrada para gestionar los cobros correspondientes; además, el alcalde advierte sobre posibles responsabilidades municipales debido a esta falta administrativa en la supervisión.
| Aspecto | Detalle | Impacto |
|---|---|---|
| Desfase | 50 papeletas sin décimos | Faltan 4 millones euros |
| Solución | Comisión cede 2M + vecinos recortan otros 2M | Cada uno pierde alrededor de ~5.000€ aprox. |
| Votos | 250 sí, 2 no | Mayoría aplastante frente a la disidencia |
| Premio por papeleta | De 80.000€ brutos → ~75.000€ | Neto alrededor ~62.000€ |
| Riesgo legal | Reventa ilegal | Posible multa al Ayuntamiento |
En resumen, Villamanín ha pasado rápidamente del júbilo al aprendizaje: aunque ganar la lotería une comunidades enteras, también puede dividirlas ante cualquier descuido administrativo. El pacto alcanzado mantiene por ahora la armonía social, aunque persisten sombras judiciales.
Este incidente relacionado con el Gordo nos recuerda que en localidades pequeñas como esta, incluso un simple despiste puede tener repercusiones tan grandes como las esperadas tras ganar el premio gordo.
Más en Estafadores
CONTRIBUYE CON PERIODISTA DIGITAL
QUEREMOS SEGUIR SIENDO UN MEDIO DE COMUNICACIÓN LIBRE
Buscamos personas comprometidas que nos apoyen
CONTRIBUYE
Home