Más información
Honduras respira aliviada tras semanas de incertidumbre. Ayer, el Consejo Nacional Electoral proclamó a Nasry ‘Tito’ Asfura como presidente electo.
Con un total del 40,26% de los votos, equivalente a unos 1,48 millones, Asfura supera a su oponente Salvador Nasralla, que se queda en el 39,5%. La diferencia es mínima: menos del 1%.
El recuento comenzó el 30 de noviembre y finalizó ayer, marcado por tensiones debido a múltiples denuncias de irregularidades.
La actual presidenta, Xiomara Castro, ha calificado la situación como un golpe electoral. Su partido, Libre, ha rechazado los resultados.
Por su parte, Nasralla exige la revisión de 10.000 urnas que contienen dos millones de votos y acusa al CNE de incumplir la ley. La situación en el consejo es tensa: dos consejeras apoyan la victoria mientras que el representante de Libre denuncia irregularidades y se dirige al Ministerio Público.
Observadores internacionales instan a cerrar el proceso rápidamente. EEUU ha advertido sobre posibles consecuencias si no se resuelve pronto.
Quién es Nasry ‘Tito’ Asfura, el aliado de Trump
Nacido en Tegucigalpa en 1958 y con raíces palestinas, Nasry Juan Asfura Zablah es un empresario del sector de la construcción. Aunque estudió Ingeniería Civil, no finalizó sus estudios. Su carrera política comenzó en los años 90 como asistente fiscal en la alcaldía y luego fue gerente de servicios públicos. En 2005 popularizó el lema ¡Papi a la orden!, que le valió su apodo.
- Ocupó el cargo de alcalde de Tegucigalpa entre 2014 y 2022 durante dos mandatos.
- Fue diputado en 2009 por Francisco Morazán.
- Dirigió el Fondo Hondureño de Inversión Social hasta 2011.
- Se postuló a la presidencia en 2021, donde perdió ante Xiomara Castro con un 31,5%.
En las primarias del Partido Nacional para estas elecciones de 2025, arrasó con un impresionante 70%. Su lema es Juntos vamos a estar bien 2026-2030, centrándose en empleo, maquila, inversión y seguridad. Propone crear policías comunitarios y mejorar la investigación criminal junto con tecnología para combatir la extorsión.
El respaldo de Donald Trump ha sido notable. Días antes del 30 de noviembre, tuiteó que Asfura era el único verdadero amigo de la libertad, posicionándolo como un aliado contra el comunismo y contra figuras como Nicolás Maduro. Durante su estancia en Washington mostró su alineación con los intereses estadounidenses. El apoyo desde EEUU al resultado no se hizo esperar; incluso Marco Rubio, secretario de Estado, ya lo felicitó.
Sin embargo, su carrera no está exenta de sombras. Hay una investigación abierta por desvío de fondos durante su gestión en la alcaldía y lo vinculan con empresas situadas en paraísos fiscales. Él niega todas las acusaciones.
Antecedentes: un escrutinio que paralizó al país
Las elecciones del 30 de noviembre se presentaron reñidas desde sus inicios. Tanto Asfura como Nasralla, ambos candidatos de derecha, mantuvieron una lucha cerrada durante semanas. La tercera posición fue para Rixi Moncada, del partido Libre, con un 19,19%. El CNE logró escrutar el 99,92% de las actas; sin embargo, los retrasos fueron constantes debido a problemas técnicos y protestas por parte de los partidos.
- Hubo manifestaciones masivas por parte de simpatizantes del partido Libre.
- Se realizó un recuento voto a voto para resolver inconsistencias en 2.972 actas.
- La presión desde EEUU fue clara: Cumplan o habrá consecuencias.
- En redes sociales, Nasralla dirigió mensajes a Trump, solicitando ayuda y denunciando que Asfura silenciaba votos.
El bipartidismo nacional-liberal ha dominado Honduras durante décadas; sin embargo, Libre rompió ese esquema en 2021 con la elección de Castro. Ahora parece que la derecha vuelve al poder. Este fenómeno recuerda lo sucedido recientemente en Chile, donde también se vio una victoria conservadora con José Antonio Kast.
La toma oficial del cargo por parte de Asfura está programada para el 27 de enero de 2027 y concluirá en 2030. Promete enfocarse en mejorar la seguridad y generar empleo; incluso ha afirmado: Honduras, estoy preparado para gobernar. No te voy a fallar.
¿Cómo evoluciona? Desafíos por delante
La polarización social va en aumento. Mientras tanto, Nasralla no reconoce los resultados y podría optar por llevar su caso ante tribunales o salir nuevamente a las calles. Tanto él como Castro han hablado sobre presuntas irregularidades masivas durante las elecciones. Marlon Ochoa del CNE considera que esto podría ser un golpe electoral, mientras Cossette López del Partido Nacional acusa al oficialismo de ataques sistemáticos.
Los escenarios posibles son variados:
| Escenario | Probabilidad | Impacto |
|---|---|---|
| Transición pacífica | Media | Que Asfura gobierne sin grandes conflictos; respaldo estadounidense presente. |
| Protestas masivas | Alta | Si logra movilizar a sus seguidores; recuerda disturbios pasados recientes. |
| Revisión judicial | Baja | Aunque los tribunales podrían intervenir; el CNE ya cerró el proceso electoral. |
| Giro regional | Alta | Se prevé más inclinación hacia la derecha en Latinoamérica; aliados con Trump. |
Los retos que enfrenta Asfura son significativos: pobreza extrema, violencia creciente y migración constante son solo algunos ejemplos. Su conexión con Trump podría atraer inversión extranjera pero también implica adoptar medidas estrictas contra el narcotráfico. Honduras necesita estabilidad urgente; su población anhela empleo y orden.
Desde Washington ven en él una barrera contra el comunismo regional; recordemos que Trump envió barcos al Caribe para combatir el narcotráfico originado en Venezuela bajo Maduro. Es posible que haya una unión estratégica entre ambos líderes.
La ajustada victoria deja cicatrices abiertas en una sociedad dividida. Ahora Honduras observa hacia adelante con esperanza pero también con incertidumbre mientras Tito Asfura toma las riendas del país. Habrá que ver si cumple sus promesas.
Más en Hispanoamérica
CONTRIBUYE CON PERIODISTA DIGITAL
QUEREMOS SEGUIR SIENDO UN MEDIO DE COMUNICACIÓN LIBRE
Buscamos personas comprometidas que nos apoyen
CONTRIBUYE
Home