Una de las adicciones más ‘sonadas’ de los últimos meses ha sido la del sexo de Tiger Woods, por la que ingresó en una clínica especializada.
Otra sobre la que se ha hablado mucho es la adicción a los videojuegos y a Internet.
Existen muchas otras y muy variopintas, pero algunas superan a todas las demás con diferencia.
El periódico Metro del Reino Unido cuenta las cinco más raras en Five of the weirdest addictions in the world:
- Adicción al Heavy Metal: un hombre en Suecia recibió prestaciones de discapacidad por ser adicto al Heavy Metal. Toger Tullegen estuvo durante diez años tratando de convencer que le discriminaban por ello y tres psicólogos lo corroboraron.
- Pagofagia, adicción a masticar hielo: consiste en la constante masticación de hielo o el consumo de bebidas con hielo granulado. Esta adicción está vinculada con bajos niveles de hierro en el torrente sanguíneo.
- Adicción al sexo: puede llevar a la masturbación compulsiva o, como en el caso de Tiger Woods, a tener múltiples parejas. Sin embargo, no es todo diversión, la adicción al sexo puede ser peligrosa ya que puede conducir a abusos, acoso e incluso violación sexual.
- Geofagia, adicción a comer tierra: implica comer barro y tierra con el fin de absorber minerales como el azufre o el fósforo.
- Adicción a blanquearse los dientes: hay gente que no puede vivir sin blanquearse los dientes cada dos por tres.

