Un ataque a la libertad real. El presidente de la Conferencia Episcopal Polaca y arzobispo de Poznan, Stanislaw Gadecki, afirma que «el respeto a los individuos no puede justificar la aceptación de una ideología (la LGTBI), cuyo objetivo es revolucionar las costumbres sociales y las relaciones personales», lo que ha traído la «devastación espiritual y material a muchas personas».
En una carta abierta, el líder de la Iglesia católica en Polonia pide a los fieles que reflexionen sobre la «ofensiva» del colectivo LGTBI, especialmente sobre «el aumento de las marchas y el intento de algunos políticos de introducir un nuevo enfoque en los programas escolares polacos».
Gadecki también sale en defensa de otros clérigos muy criticados por sus duras palabras sobre el entorno LGTBI, entre ellos el arzobispo de Cracovia, Jerzy Jedraszewski, quien comparó «la peste LGTBI del arco iris» con la ideología estalinista impuesta en parte de Europa tras la II Guerra Mundial.
«Las críticas a estos hombres de la Iglesia demuestran el totalitarismo ideológico tan arraigado en ciertos entornos, que busca eliminar y dejar fuera de la esfera pública a las personas que piensan de manera diferente», asevera el arzobispo de Poznan.
El jefe de la Iglesia polaca reclama «a todos los actores sociales» que eviten «la discriminación a la hora de encarar el debate» sobre la ideología LGTBI, y permitan también que quienes se oponen a este movimiento puedan expresar sus opiniones en libertad e igualdad de condiciones.
La cercanía de las elecciones generales, que se celebrarán el 13 de octubre de 2019, augura que el debate sobre la ideología LGTBI seguirá muy presente en la vida pública polaca durante las próximas semanas.
