Lo que muchos analistas consideraban un escenario “optimista pero poco probable” ha quedado obsoleto: el Ibex 35 ha alcanzado la barrera de los 17.000 puntos, tras un incremento cercano al 45% en 2025, superando con creces las previsiones de subidas de un solo dígito que preveían la mayoría de las entidades al inicio del año.
Este movimiento no solo arrasa con las expectativas; también obliga a reescribir la narrativa sobre la bolsa española y a examinar con atención las proyecciones económicas para los próximos meses.
Este rally se produce en un contexto donde los principales índices europeos también tocan máximos históricos, pero el rendimiento del selectivo español resalta incluso frente al EuroStoxx 50 o el DAX alemán.
Gracias al impulso del sector bancario y a un cambio en la dirección de los flujos hacia sectores cíclicos y financieros, el Ibex se posiciona como líder en Europa. Para los inversores, esto plantea dos interrogantes fundamentales: ¿qué ha llevado a este despegue? Y, sobre todo, ¿cuánto de este avance es sostenible?
Qué ha disparado al Ibex: tres motores claros
Detrás del ascenso del Ibex hay tres factores clave que se retroalimentan:
- Banca en modo turbo
- Mejoría macroeconómica en España y Europa
- Inversión masiva de capital internacional en activos europeos considerados “baratos”
1. El papel central de la banca
Las entidades financieras españolas han emergido como el principal motor del índice.
- La combinación de tipos todavía altos en la zona euro, una curva de tipos más equilibrada y un ciclo de morosidad controlada ha permitido a bancos como Banco Santander, BBVA, CaixaBank o Banco Sabadell mantener márgenes de interés sólidos y mejorar sus beneficios.
- El mercado ha recompensado esta mejora con subidas mucho más pronunciadas que las del índice, lo que ha potenciado aún más el avance del Ibex debido al peso significativo del sector financiero dentro del selectivo.
- Además, una política agresiva de dividendos y recompra de acciones ha elevado la rentabilidad total para los accionistas y ha reforzado el atractivo relativo de la banca frente a otros sectores defensivos europeos.
Para los inversores, el mensaje es claro: el rally del Ibex no se puede entender sin considerar a la banca. Esto significa que cualquier cambio en la comunicación del BCE sobre tipos o en las expectativas relacionadas con el crédito puede influir directamente en el índice.
2. Evolución económica mejor de lo descontado
El segundo pilar fundamental proviene de datos macroeconómicos.
- España ha continuado mostrando un crecimiento del PIB por encima de la media europea, respaldado por servicios, turismo y una leve recuperación en inversiones, lo cual ha beneficiado a las empresas cotizadas ligadas al consumo interno y a la actividad nacional.
- La inflación ha disminuido desde sus niveles máximos recientes, lo que ha proporcionado alivio tanto a hogares como a empresas y ha reducido el riesgo de un endurecimiento adicional en la política monetaria.
- Los mercados han comenzado a anticipar un escenario “goldilocks” moderado: crecimiento aceptable, inflación controlada y un BCE que pasa de ser una amenaza a convertirse en un apoyo gradual para los activos más arriesgados.
Este entorno propicia que el flujo de noticias empresariales (resultados, guías y revisiones) se ajuste mejor a las expectativas, disminuyendo así el riesgo de advertencias sobre beneficios generalizadas y aumentando la confianza entre los inversores institucionales hacia la bolsa española.
3. Dinero internacional y revalorización de la bolsa española
El tercer factor es más técnico pero igualmente relevante: la revalorización de múltiplos y el regreso del capital internacional.
- Durante años, el Ibex había cotizado con un notable descuento respecto a otros índices europeos, afectado por su alta exposición al sector bancario, incertidumbre política y una escasa representación de sectores dinámicos (tecnología, salud).
- En 2025, diversos elementos han transformado esa percepción:
- Mejora relativa en estabilidad política.
- Atractivo creciente hacia Europa tras un periodo donde Wall Street acaparó flujos.
- Búsqueda activa de valor y dividendos en sectores infravalorados.
- El resultado es que los múltiplos de valoración (PER, precio/valor contable en banca) se han expandido, proporcionando un impulso adicional al índice más allá del simple crecimiento en beneficios.
Para los inversores, esto significa que una parte del rally del Ibex responde a una revalorización estructural; sin embargo, otra parte es cíclica y podría ser más susceptible a cambios sentimentales o rápidos giros en flujos globales.
Un año récord: contexto histórico del rally
El desempeño del Ibex durante 2025 ya figura entre los mejores ejercicios recientes.
- El índice ha acumulado subidas superiores al 30%, acercándose al entorno del 45% acumulado, según informes sobre índices europeos.
- Relativamente hablando, el Ibex ha superado:
- Al EuroStoxx 50, que avanza entre un 10% y un 15% este año.
- Al DAX alemán, que también muestra revalorizaciones notables pero inferiores al selectivo español.
La combinación del robusto desempeño bancario, recuperación cíclica y rotación desde mercados más caros (especialmente Estados Unidos) han colocado al Ibex bajo el radar de gestoras globales que antes lo habían relegado a una posición secundaria dentro de sus carteras europeas.
Predicciones económicas y bursátiles: ¿y ahora qué?
Con el Ibex situado ya en los 17.000 puntos, las proyecciones económicas y bursátiles formuladas al inicio del año han quedado desactualizadas. Es momento de replantear escenarios.
Escenario macro base que descuenta el mercado
Las curvas de tipos junto con las valoraciones sugieren que actualmente el mercado opera bajo algo similar a este guion:
- Un crecimiento moderado pero positivo del PIB español apoyado por servicios, turismo e inversión normalizada.
- Una desinflación gradual, sin llegar nuevamente a niveles cercanos a cero para tipos de interés; eso sí, con costos claramente inferiores a los máximos alcanzados durante el ciclo anterior.
- Beneficios empresariales estables o incluso creciendo en sectores clave para el Ibex (banca, utilities, infraestructuras, energía y algunas industrias).
Este panorama justifica niveles elevados para los índices; sin embargo, deja poco margen para equivocaciones si la realidad se desvía.
Riesgos que pueden cambiar el guion
Las previsiones económicas y bursátiles están actualmente expuestas a diversas fuentes de riesgo:
- Política monetaria
- Si vuelve a repuntar o estancarse la inflación, es posible que el BCE tenga que adoptar un tono más restrictivo; esto podría impactar negativamente tanto sobre la banca como sobre valores sensibles a tipos.
- Crecimiento global
- Una desaceleración más aguda en Estados Unidos o China podría afectar negativamente tanto al comercio como a la demanda turística crucial para España.
- Riesgo político y regulatorio
- Cambios fiscales relacionados con bancos o modificaciones regulatorias en energía o políticas habitacionales e infraestructuras podrían alterar las previsiones para sectores con gran peso dentro del Ibex.
En definitiva, este escenario positivo no está blindado. Las previsiones económicas hoy consideradas razonables podrían ser objeto rápido de revisión si alguna variable se tuerce.
Estrategias concretas para inversores
Con un Ibex que ha experimentado grandes subidas rápidamente, gestionar riesgos cobra especial relevancia. Aquí algunas pautas prácticas:
- No seguir precios sin criterio
- Tras ese incremento cercano al 45%, entrar agresivamente sin filtros implica asumir elevados riesgos ante posibles correcciones tácticas. Es más sensato realizar entradas escalonadas priorizando compañías con visibilidad sobre sus beneficios y balances sólidos.
- Revisar exposición bancaria sin abandonarla
- Aunque este sector ha sido indiscutiblemente ganador recientemente sigue ofreciendo:
- Rentabilidades por dividendo atractivas.
- Sensibilidad positiva ante un entorno donde aún no hemos regresado completamente a esa “vieja normalidad” con tipos cero.
- Estrategia prudente:
- Mantener exposición pero diversificando entre bancos centrados principalmente en España junto con otros con mayor presencia internacional.
- Evitar concentrar riesgos excesivos sobre una única entidad.
- Aunque este sector ha sido indiscutiblemente ganador recientemente sigue ofreciendo:
- Combinar cíclicas con defensivas sólidas
- Los inversores pueden equilibrar su cartera incluyendo:
- Empresas dedicadas a infraestructuras y utilities capaces de generar flujos estables junto con dividendos.
- Cíclicas industriales o relacionadas con consumo que puedan beneficiarse durante ciclos económicos favorables pero cuenten con valoraciones razonables.
- Los inversores pueden equilibrar su cartera incluyendo:
- Utilizar información macro como herramienta analítica
- Las proyecciones económicas son útiles para definir escenarios; no obstante no reemplazan análisis exhaustivos sobre:
- Valoración.
- Calidad empresarial.
- Gobierno corporativo.
- Las proyecciones económicas son útiles para definir escenarios; no obstante no reemplazan análisis exhaustivos sobre:
- Vigilar múltiplos junto con expectativas
- Parte importante del rally proviene precisamente por expansión múltiple.
- El margen para seguir revalorizando sin acompañamiento real en beneficios es limitado.
- Conviene enfocarse en empresas donde su crecimiento justifique su cotización actual.
Qué observar en los próximos meses
Para determinar si el Ibex puede mantenerse por encima de los 17.000 puntos e incluso aspirar nuevas subidas hay varios indicadores clave:
- La evolución esperada en beneficios por acción (BPA) entre los componentes indexados durante las próximas dos o tres temporadas.
- Revisión continua por parte analistas: si estas estimaciones siguen siendo positivas puede facilitar digestión ante valoraciones actuales; si comienzan ajustes negativos aumentaría riesgo ante correcciones rápidas.
- Mensajes provenientes tanto del BCE como otros bancos centrales respecto trayectoria futura sobre tipos.
- Datos relacionados con PIB, inflación y empleo tanto españoles como europeos ofrecerán pistas sobre solidez detrás ese deseable “aterrizaje suave”.
En resumen; El Ibex nos demuestra cómo aún hay espacio para sorpresas incluso frente pronósticos optimistas previos. Para quienes invierten ahora ya no se trata solo adivinar cuál será próximo rally sino administrar inteligentemente lo que queda por venir.

