Harto de abril, harto de lluvia

A la paz de Dios, queridos amigos, déjenme empezar por decirles que estoy hasta el gorro de este invierno que dura hasta mediados de abril. Y los que nos queda. Reconozco que el invierno nunca me había molestado tanto como este año, pero sinceramente estoy hasta el flequillo de frío y de lluvia, de lluvia y de frío. Ya, ya sé que la lluvia es imprescindible, que la necesitamos para regar, para lavarnos y hasta para beber, es decir, para hacer cerveza. En Cantabria están hasta el gorro de sus meteorólogos porque predicen lluvia, el turismo se va y luego no llueve. Los nuestros predicen lluvia y aciertan, se los cambiamos. Yo tenía preparada para hoy una elegía a la primavera, muy bella, emocionante y llena de campos en flor, trinos encadenados y otras mandangas de esas. Pero cuando me senté a escribirla estaba lloviendo y cuando terminé estaba lloviendo, así que me alejé a la línea de tres puntos y encesté en la papelera.

A nosotros no nos queda ni el recurso del turismo estacional que tienen en Cantabria, esa Cantabria que siempre fue el puerto de Castilla hasta que a alguien se le ocurrió cómo encontrar trabajo a Miguel Ángel Revilla. A nosotros solo nos queda la Olmeda y su cincuentenario. Y el camino de Santiago. Y el románico. Pero el pérfido turista sigue prefiriendo la playa. Si yo fuese diputado palentino, en las cortes de Valladolid o en las de Madrid protestaría porque los presupuestos del Estado prevean un 32% de aumento de la inversión en el País Vasco (¿Por qué siempre se premia a los más ricos, por qué no se redistribuye la riqueza? y pediría que esa cantidad se empleara en crear una playa en Palencia. Anda que no íbamos a estar chulos nosotros con una playa en la Valdavia, para que vinieran los turistas a solazarse frente al mar y teniendo los Picos de Europa como fondo, por ejemplo. Por cierto, qué bonitos están ahora mismo, todos vestiditos de blanco, vistos desde la meseta. Y si emplear ese dinero en crear una playa les parece una desmesura pues que se emplee en crear puestos de trabajo, por ejemplo. Por cierto, lo que a mí me parece una desmesura es que no se redistribuya la riqueza entre todas las regiones, que solo se premie a… ¿se han fijado ustedes a quién se premia siempre en los presupuestos del Estado? Y siempre con el voto afirmativo de ls diputados palentinos. Unas veces de un partido y otras de otro.

Pero cuando la inversión del Estado sube un 32% nunca es para Palencia. Eso sí, la autovía A-67, la Cantabria-Meseta sigue hecha un Ecce Homo, llena de heridas, magulladuras, llagas, heridas y otras esclavitudes. Miren, más que una autovía parece un Via-Crucis. Se me ocurre que si cada veinte kilómetros montamos una pequeña exposición con obras de nuestro románico, algo así como una antesala a las Edades de Hombre de Aguilar, y ponemos una cafetería restaurante en la que el plato principal sea la menestra palentina, cangrejos del Pisuerga todo acompañado de pan de tierra de Campos y patatas de la Ojeda a lo mejor ganábamos algo. Eso sí, yo trasladaba entera la portada de Revilla de Santullán, con su “Michaelis me fecit”, y ponía de regalo unas lámparas de rayos UVA para que el personal se morenease mientras contemplaba estas maravillas palentinas con ochocientos años de antigüedad. Sin lo del moreneo y unas cervezas la cosa no atraería igual, España es “asín”.

Ponemos un cartel en una salida de la autovía anunciando “Iglesia de San Cornelio y San Cipriano” y se nos ríen en la cara. Pero al lado ponemos “Rayos UVA gratis” o también “Cerveza gratis” y se nos llena de guiris. Bueno, guiris y nacionales, que donde haya de papear sin pagar siempre está lleno.

Vale, señores, les dejo, que la ventana me pilla un poco lejos y quiero ver si llueve. Quiero decir “ver si sigue lloviendo”, que últimamente es un sin parar. Hay un recóndito valle, entre Cantabria y Palencia donde suelo irme cuando la primavera está por llegar, para ver verde, frescor, otra luz… otros olores, otras sensaciones… Este año no hará falta, al parecer. Seguirá lloviendo y tendremos ese escondido valle aquí, en la meseta, con regatos que escolingan ladera abajo. Por cierto, ¿alguien sabe cuánto falta para que se llenen los pantanos que antier estaban vacíos?
………………………..
*Esta es mi colaboración semanal con Onda Cero Palencia, a la que he añadido un título para este blog

CONTRIBUYE CON PERIODISTA DIGITAL

QUEREMOS SEGUIR SIENDO UN MEDIO DE COMUNICACIÓN LIBRE

Buscamos personas comprometidas que nos apoyen

COLABORA

Pedro de Hoyos

Escribir me permite disfrutar más y mejor de la vida, conocerme mejor y esforzarme en entender el mundo y a sus habitantes... porque ya os digo que de eso me gusta escribir: de la vida y de los que la viven.

Lo más leído