No están siendo unas vacaciones tranquilas para la Familia Real. Las especulaciones han marcado la primera semana de los Reyes en Palma y diversos rumores sobre el divorcio entre don Felipe y doña Letizia marcan la actualidad en torno a La Zarzuela.
La actitud de la Reina Letizia, tal y como anticipaba Periodista Digital, durante estas vacaciones tampoco está ayudando a diluir los continuos dimes y diretes sobre esa posible separación matrimonial. Doña Letizia se ha negado a acompañar al Rey Felipe VI a las regatas (El Rey Felipe VI y la Reina Letiza están al borde del divorcio…)
Al club náutico el Monarca acudía en solitario y únicamente la compañía, en ocasiones, de doña Sofía o de su hermana, la Infanta Elena, han evitado la imagen de soledad de Don Felipe.
Algunas fuentes cercanas a Palacio dan por hecho la próxima separación matrimonial entre don Felipe y doña Letizia y en la Casa Real esa es una cuestión que sencillamente aterra.
¿Imaginan a Letizia Ortiz volviendo a ejercer el periodismo, escribiendo libros o concediendo entrevistas por los platós?
Sin embargo, esta posibilidad (de momento lejana) no preocupa tanto como otra que ahora mismo provoca todos los dolores de cabeza de la seguridad de La Zarzuela y del Estado: el teléfono móvil de la Reina Letizia.
Así es, aunque en público jamás se le ha visto a la actual Reina haciendo uso del móvil, la Reina dispone de un smartphone con el que lógicamente se comunica con sus familiares, amigos y otros allegados.
Entre los responsables de seguridad de Palacio hay una preocupación por culpa de un insistente rumor relacionado con unas supuestas filtraciones de las conversaciones privadas de la Reina.
La Casa Real maneja la posibilidad de que se hayan producido capturas gráficas de conversaciones (incluso se habla de grabaciones) de la Reina Letizia con una «amistad» en las que además de hablar de sus asuntos privados destacaría la especial virulencia de los ataques personales hacia don Juan Carlos y doña Sofía.
También críticas en general a la Familia Real por su comportamiento «nada ejemplar» a juicio de la actual Reina y reproches hacia su marido, el Rey Felipe VI.
Evitar que se produzcan esas filtraciones es hoy una prioridad de los servicios de Seguridad de La Zarzuela que, según apuntan a Periodista Digital fuentes cercanas a Palacio, de momento ha solicitado a doña Letizia que reduzca en la medida de lo posible el uso del teléfono móvil personal, así como que use uno antiguo convencional y no un smartphone.
Pero el terror a que ya se haya producido lo inevitable es algo pesa como una losa en la Casa Real.
