Madrid se prepara para vivir una experiencia sin precedentes, un pedacito de Perú que llega para conquistar las noches (y los días) de la capital. Del 11 al 14 de diciembre, la Embajada del Perú en España te invita a un viaje único: la I Ruta del Pisco. Imagina poder recorrer algunos de los bares y restaurantes con más solera de la ciudad, desde Salamanca hasta Chamberí, y descubrir en cada uno de ellos el alma vibrante de esta bebida espirituosa que es mucho más que un simple aguardiente. Es historia, es cultura y es puro sabor en estado puro.
Hablar de Pisco es, inevitablemente, hablar de Perú. No es una exageración, es una verdad que late en cada copa. Esta iniciativa nace con un propósito claro: abrir las puertas de par en par para que los madrileños y visitantes conozcan de primera mano el origen, el meticuloso proceso de elaboración y la versatilidad asombrosa de este emblema nacional. Quien crea que el pisco es solo para un pisco sour se llevará una sorpresa mayúscula. La coctelería contemporánea ha abrazado sus matices, y barmans de renombre demostrarán su savoir faire con creaciones exclusivas que realzan su personalidad.
¿Qué hace al pisco peruano tan especial?
Para empezar, es único en el mundo. No es una imitación de nada. Cuenta con una Denominación de Origen reconocida por organismos internacionales de primer nivel, como la UNESCO. Este sello no se concede a la ligera; es un guardián que protege su esencia. Se reserva exclusivamente para el aguardiente de uva que se produce en el Perú desde finales del siglo XVI, utilizando uvas conocidas como «pisqueras» cultivadas en la costa de regiones como Lima, Ica, Arequipa, Moquegua y Tacna. Los métodos, heredados de generación en generación, persiguen un solo objetivo: mantener unos estándares de calidad innegociables.
El nombre mismo, «pisco», es un homenaje a su cuna. Proviene del pueblo de Pisco, en la región de Ica, que durante la colonia española era el puerto clave desde donde se exportaba este preciado destilado. Las primeras referencias documentadas nos trasladan a 1613, hablando de un legado que ha sido declarado Patrimonio Cultural de la Nación. Por su importancia histórica y tradicional, el pisco es un Producto Bandera para los peruanos. El país asume con orgullo la defensa internacional de su autenticidad, un rol que va más allá de lo comercial para erigirse en un verdadero embajador cultural. “Hablar de pisco es hablar del Perú”. Esta frase no es un eslogan vacío; es la conclusión natural de quien conoce su trayecto.

La magia del pisco reside en la diversidad
No existe un solo pisco, sino múltiples variedades que surgen de las diferentes uvas pisqueras. Cada una aporta una personalidad distinta: desde los aromáticos y florales hasta los más intensos y corpulentos. Esta riqueza es un reflejo directo de la tierra, el clima y, sobre todo, del arte y el esfuerzo acumulado de generaciones de productores peruanos. Promocionar el pisco internacionalmente no es solo dar a conocer una bebida; es crear oportunidades comerciales, abrir nuevos mercados y atraer inversión, lo que a su vez garantiza la sostenibilidad económica y social de las regiones productoras. Beber un pisco es, en cierto modo, ser parte de ese círculo virtuoso.
Pero volvamos a Madrid y a esta ruta que promete colorear la ciudad. La idea es tan sencilla como brillante: más de treinta establecimientos se convierten en embajadores temporales del pisco peruano. Podrás descubrir las marcas más prestigiosas, como Pisco Madre, Sarcay, 1615, Hermano o Demonio de los Andes, de la mano de coctelerías y restaurantes que son referencia en la capital.
Piensa en empezar la ruta en Salmon Guru, un local de culto en la calle de Echegaray, donde la coctelería es un espectáculo. O dejarte sorprender por las creaciones en Angelita Madrid, un clásico que siempre innova. Para los amantes de los sabores nikkei, Lima Nikkei o Ponja Nikkei ofrecerán una armonía perfecta entre sus platos y los cocktails de pisco. La elegancia de Zoku Madrid en Salamanca o el ambiente vibrante de Viva Madrid en el barrio de las Letras serán también escenarios perfectos para esta celebración.
Establecimientos como La Analógica o 1862 Dry Bar demostrarán la versatilidad del pisco en cocktails clásicos y de autor. Mientras, restaurantes como Quispe o Mikuna te invitarán a maridar esta bebida con la rica gastronomía peruana, explorando cómo un buen pisco puede elevar el sabor de un ceviche o de un postre tradicional.

La lista de participantes es larga y llena de propuestas interesantes: Absent, con su atmósfera única; Acholao, un rincón con encanto; Akiro Hand Roll Bar, para una experiencia diferente; Chifa, con su fusión chino-peruana; Dantte, en el barrio de Chamberí; Devil Cut, un templo para los amantes del cocktail; Eclipse Coctelería, con sus vistas y ambiente; Ekö Bistro, ideal para una velada tranquila; Funvalista, en el corazón de Las Huertas; Gabos NY, donde el estilo se une al sabor; La Estrella, un clásico madrileño; Mateo Honten, con propuestas cuidadosamente elaboradas; Momus Coctelería, un must en Malasaña; Shift Public House, de concepto innovador; SSSPresso, para un alto diferente; Trafalgar Coctelería, con su amplia experiencia; Noname Bar Madrid, discreto y excelente; Gil’s Cocktail Bar, pura elegancia en Recoletos; Relatives, perfecto para una cita; Quinto Elemento, con una propuesta gastronómica de altura; Regañadientes, ideal para picar algo con el cocktail; y Tarantella, en el barrio de Retiro.
Esta I Ruta del Pisco no es un evento más. Es la oportunidad perfecta para profundizar en un mundo lleno de matices. Te permitirá entender por qué su protección es tan importante, de la misma manera que lo es para el champán francés. Cada copa cuenta una historia de terruño, de pasión y de identidad. Es una invitación a explorar, a preguntar a los bartenders, a dejarse guiar por sus recomendaciones y a formar tu propia opinión sobre las distintas variedades.
Así que, si estás en Madrid entre el 11 y el 14 de diciembre, tienes una cita ineludible. La ciudad se llenará de cócteles creativos, de aromas a uva pisquera y de la calidez peruana. Es tu momento para descubrir por qué el pisco es un orgullo nacional y por qué, una vez que lo pruebas, ya nada vuelve a ser igual.
Recorre la ruta, elige tus locales favoritos y prepárate para vivir una auténtica fiesta del sabor peruano en el corazón de España. No te lo pierdas.
