El impuesto a los bancos
Hoy en día es obligatorio tener cuenta en un banco. Para pagar a Hacienda, para pagar la luz, para cobrar el paro… No siempre fue así. En tiempos pasados no eran pocos los que guardaban el dinero en sus casas, y recibían en ellas a los cobradores del gas, o de lo que fuera. Había muchos más bancos que en la actualidad y, además, estaban las cajas de ahorros. Las cuentas corrientes o libretas de ahorro eran gratuitas y retribuidas, modestamente, con intereses. Los pobres estaban bien atendidos en los bancos y cajas, y si no lo eran podían cambiar ...