A lo largo de más de siete décadas, Jerry Adler supo conjugar con maestría la sabiduría de los escenarios neoyorquinos y la autenticidad en la pantalla, convirtiéndose en uno de los intérpretes más queridos por varias generaciones.
Su muerte, a los 96 años, ha despertado un sincero sentimiento de duelo en el mundo del espectáculo y entre quienes encontraron en sus personajes un reflejo de la complejidad humana.
Adler, quien encarnó al inolvidable Hesh Rabkin en la serie ‘Los Soprano’, falleció este sábado, según confirmó su familia, dejando tras de sí una vida dedicada al arte y a la representación de identidades tan diversas como profundas.
La noticia fue recibida con emotivas muestras de cariño por parte de colegas y admiradores. En redes sociales, el también actor Frank J. Reilly destacó la generosidad del fallecido: “El gran actor, mi amigo Jerry Adler murió hoy… Lo conocéis por sus papeles icónicos y por sus apariciones inolvidables. Fue quien consiguió un trabajo para mi hijo en Los Soprano; años después, mi hijo hizo lo mismo por él en Rescue Me. Descansa en paz, auténtico”. El periodista Matthew Rettenmund recordaba su tenacidad: “Comenzó a actuar a los sesenta años, trabajó veintiocho más y todavía le quedaron años para retirarse, tras haber estado vinculado a Broadway desde 1950”.
Una vida entre bambalinas y focos
Nacido el 4 de febrero de 1929 en Brooklyn, Nueva York, Jerry Adler creció rodeado del bullicio teatral: su padre gestionaba salas emblemáticas y giras. El joven Jerry se integró pronto en el mundo escénico como stage manager, participando desde 1950 en más de cincuenta producciones de Broadway. Entre ellas destaca la histórica ‘My Fair Lady’, donde ejerció como director de escena y supervisor de producción. Su talento para organizar el teatro se reflejó también en títulos como ‘Annie’ o ‘I Remember Mama’, marcando un antes y un después en la profesionalización del oficio.
No obstante, su carrera dio un giro insólito cuando decidió probar suerte delante de las cámaras ya entrados los sesenta años. Su debut actoral llegó con una participación en ‘Brooklyn Bridge’ (1991), seguido por apariciones recurrentes como Mr. Wicker en ‘Mad About You’. La madurez interpretativa le permitió dotar a sus personajes de matices singulares; así lo demostró en el filme de Woody Allen ‘Manhattan Murder Mystery’ (1993), que le dio proyección internacional.
El legado televisivo: Hesh Rabkin y más allá
El papel que cimentó la fama universal de Adler fue sin duda el del consigliere judío Herman “Hesh” Rabkin en ‘Los Soprano’ (1999-2007). Su personaje era mucho más que un asesor financiero; era confidente, voz moral y vínculo con las raíces del clan Soprano, aportando profundidad cultural al universo mafioso creado por David Chase. Hesh encarnaba la convivencia tensa entre tradición judía y pragmatismo criminal, siendo clave en episodios inolvidables como “Chasing It”, donde sus diálogos con Tony Soprano revelan lealtad pero también un fino sentido crítico. La interpretación de Adler dotó al personaje de una dignidad y una sabiduría que trascendían los estereotipos.
Adler supo trasladar esa versatilidad a otros títulos televisivos: fue el abogado Howard Lyman en ‘The Good Wife’ y su spin-off ‘The Good Fight’, así como el jefe Sidney Feinberg en ‘Rescue Me’. Además, participó en series como ‘Northern Exposure’, ‘Hudson Street’, ‘Alright Already’ o ‘Raising Dad’, acumulando más de sesenta créditos audiovisuales entre cine y televisión durante casi tres décadas.
Testimonios y homenaje
La industria teatral tampoco ha dejado pasar su legado. En 2019 acudió a SopranosCon para reencontrarse con compañeros y seguidores, testimonio vivo del cariño que despertó entre generaciones. El tributo colectivo destaca su capacidad para dotar a cada escena —ya fuese cómica o dramática— de autenticidad, profundidad y humanidad.
Actores como James Gandolfini (fallecido prematuramente en 2013), Robert Loggia o John Heard compartieron con él escenas memorables; todos ellos forman parte del panteón que hizo posible una serie tan influyente como ‘Los Soprano’. Tras conocerse la noticia del fallecimiento, las redes se llenaron de mensajes evocando frases icónicas (“RIP Hesh”, “Sleeping with the fishes”) y anécdotas sobre su profesionalidad.
La causa exacta del fallecimiento no ha sido comunicada públicamente. Adler deja atrás a su esposa, la psicóloga Joan Laxman, con quien contrajo matrimonio en 1994.
Actos conmemorativos
A día de hoy, 24 de agosto del 2025, se han anunciado actos privados para despedir al artista; numerosos colegas han manifestado su intención de rendirle homenaje tanto en el entorno teatral neoyorquino como dentro del círculo televisivo.
Trayectoria vital y profesional
- Fecha y lugar de nacimiento: 4 febrero 1929, Brooklyn (Nueva York)
- Educación: Se formó esencialmente entre bastidores junto a su padre; no consta formación universitaria específica
- Hitos profesionales:
- Stage manager desde 1950
- Supervisor y director teatral (‘My Fair Lady’, ‘Annie’, ‘I Remember Mama’)
- Debut actoral tardío (‘Brooklyn Bridge’, 1991)
- Mr. Wicker (‘Mad About You’, 1993-99)
- Hesh Rabkin (‘Los Soprano’, 1999-2007)
- Howard Lyman (‘The Good Wife’, 2011-16; ‘The Good Fight’, 2017-18)
- Sidney Feinberg (‘Rescue Me’, 2007-11)
- Participaciones recientes: ‘Broad City’, ‘Transparent’, revival de ‘Mad About You’ (2019)
- Obras reconocidas: Más de cincuenta producciones teatrales; películas destacadas (‘Manhattan Murder Mystery’, ‘Getting Away with Murder’, ‘In Her Shoes’, ‘Synecdoche, New York’, ‘A Most Violent Year’)
- Premios: No se han documentado galardones mayores individuales pero sí reconocimiento institucional por su trayectoria escénica
- Familia: Casado desde hace tres décadas con Joan Laxman
La última escena que deja Jerry Adler es la memoria viva del oficio bien hecho: el arte escénico entendido como servicio al público y homenaje a las propias raíces culturales. En cada diálogo encarnado —desde los consejos a Tony Soprano hasta las réplicas mordaces frente al drama— resonará siempre el eco irrepetible del talento genuino.
