Se está poniendo esto de color hormiga (Julio Fernández: «No diga miedo, diga Apple: Análisis S&P 500, DAX, Ibex 35 y EUR/USD»).
Wall Street está inquieto y los inversores preocupados por las dudas sobre la ralentización global.
La Bolsa de EE UU acumula pérdidas del 20% en el último trimestre. El petróleo también se ha desplomado, las tensiones políticas en Washington no ayudan a la economía, y el crecimiento de China se desacelera sin registrar aún los efectos de la guerra comercial.
El presidente de la Reserva Federal pidió este viernes «paciencia» a los mercados y se mostró dispuesto a cambiar su política de subida de tipos si el clima empeora.
Wall Street respondió con ganancias superiores al 3% tras sumar pérdidas en la víspera.
El anuncio del consejero delegado de Apple, Tim Cook, de que la compañía tendría que revisar a la baja su pronóstico de ingresos trimestrales por primera vez en 16 años a consecuencia de las reducidas ventas del iPhone en China ha supuesto un sobresalto en las bolsas de todo el mundo y ha encendido las alarmas de los analistas.
El motivo no es esta vez el clásico sobredimensionamiento mediático de cualquier circunstancia que afecte a la icónica compañía.
La razón es que, según aseguran los expertos, podría ser uno de los primeros síntomas que nos trae 2019 de un serio enfriamiento de la economía mundial.
